El rey Jaled de Arabia Saudí fue enterrado ayer en Riad

El rey Jaled de Arabia Saudí murió ayer en la ciudad costera de Taif de una crisis cardíaca, a los 69 años de edad. Siete horas después de su muerte fue enterrado en Riad, adonde su cadáver había sido trasladado desde el lugar de su fallecimiento. Su hermanastro, Fahd, de 59 años, hasta ayer príncipe heredero y viceprimer ministro, fue designado rey inmediatamente. El nuevo heredero es el príncipe Abdullah, de 58 años, hermano de Fahd y hasta ahora comandante en jefe de la Guardia nacional saudí y segundo viceprimer ministro.

Al poco de conocerse la noticia del fallecimiento del rey, la población de Arabia Saudí fue exhortada a apoyar al nuevo monarca, que junto al príncipe heredero Abdullah, presidió ayer la inhumación del cadáver de Jaled, en Riad, tras una ceremonia religiosa oficiada en la gran mezquita de la capital saudí.En el entierro se hallaban presentes los más destacados miembros de la familia real saudí, así como los emires (de Bahrein, Qatar y de Kuwait. Saddam. Hussein, presidente del Consejo del Mando de la Revolución iraquí llegó ayer a Riad para asistir a las exequias del monarca, en las que se espera asimismo la asistencia de Hosni Mubarak, presidente de Egipto.

El monarca difunto había viajado el pasado sábado a la ciudad de Taif, donde tenía establecida su residencia de verano. Su salud se había visto nuevamente deteriorada en las últimas semanas, según anunció la agencia oficial de noticias saudí, Spa.

El mal estado de salud del rey Jaled le había obligado a ceder en los últimos meses, en manos de su heredero Fahd, gran parte de sus responsabilidades y funciones

La población saudí recibió con calma la noticia del fallecimiento. Las autoridades de Riad no adoptaron, al parecer, ninguna medida de seguridad especial.

En el mundo, las reacciones internacionales a la muerte del rey Jaled han sido comedidas. Estados Unidos, a través de un portavoz del Departamento de Estado, subrayó que Washington "ha mantenido durante medio siglo relaciones cordiales y calurosas con Arabia Saudí y espera mantener este clima en el futuro".

La portavoz, Amita Stockman, no precisó si el Gobierno norteamericano enviará un representante oficial a los solemnes funerales que hoy se celebrarán en la capital saudí. En un principio se pensé que el enviado especial de Ronald Reagan a Israel, Phillip Habib, podría representar al presidente norteamericano en los funerales, pero esta especulación no fue confirmada.

En Washington se subrayaba ayer que el nuevo rey, Fahd Ben Abdel Aziz, fue el artífice el pasado verano de "la compra del siglo" saudí a Estados Unidos de los cinco aviones-radar Awacs, incorporados a la fuerza aérea de Riad. La venta fue muy contestada entonces por Israel, que de este modo veía muy amenazada su seguridad en la región.

En Egipto, país que vió rotas sus relaciones diplomáticas con el régimen de Riad a consecuencia de su rúbrica de los Acuerdos de Camp David, firmados por Jimmy Carter, Menájem Beguin y Anuar el Sadat, en 1979, la muerte del monarca saudí provocó una viva sorpresa. Las emisoras de radio y televisión, tras informar del fallecimiento del rey Jaled, pasaron a emitir música sacra y a difundir versículos del Corán.

El rey de España envió ayer a la familia real saudí un mensaje de condolencia en el que mostraba su pesar, el de la reina y el de todo el pueblo español, "por la triste noticia del fallecimiento de mi hermano y buen amigo el rey Jaled de Arabia Saudí".