Los mineros de Cala abandonaron ayer su encierro como condición previa para entrevistarse con Calvo Sotelo

Los veintiséis mineros encerrados en la mina de Cala (Huelva) desde el pasado día 29 de marzo, abandonaron ayer, a las 18.30 horas, la galería, condición imprescindible para la entrevista que mañana mantendrán sus representantes con el presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo. Los mineros, no obstante, permanecen concentrados en las proximidades de la boca del túnel para ocuparlo de nuevo si las conversaciones con Calvo Sotelo no las consideran fructíferas o si la fuerza pública recibe la orden de desalojarlos.

El presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, recibirá mañana, a las 12.30 horas, a una representación de los mineros encerrados en la mina de Cala integrada por tres miembros del comité de empresa y dos sindicalistas. A la reunión asistirán el ministro de Industria y Energía, Ignacio Bayón, y el presidente de la Junta Regional de Extremadura, Manuel Bermejo, quien gestionó la entrevista entre mineros y Gobierno.Los mineros, antes de concertarse esta entrevista con Calvo Sotelo, insistieron en acudir únicamente en el caso de que se adelantara de forma decidida en la aprobación de la inversión para la planta de pellets de Fregenal de la Sierra. La impresión que se tenía ayer del contacto con el presidente del Gobierno era que éste no iba a prometer la instalación inmediata de la planta, pero sí iba a ofrecer garantías de que se realizará en un tiempo prudencial.

La Comisión Delegada para Asuntos Económicos examinó ayer el proyecto Presur en relación con los últimos acontecimietos. Se espera que el nuevo informe técnico ordenado por el Consejo de Ministros sobre la viabilidad económica de la planta de pellets en Fregenal de la Sierra estará ultimado en el plazo de 45 días.

A los mineros encerrados se les confirmó a las dos de la tarde de ayer la entrevista con Calvo Sotelo. Tras realizar una asamblea por espacio de tres horas, decidieron abandonar la galería provisionalmente. A las 18.30 horas de la tarde, todos estaban en el exterior respirando aire fresco.

En el transcurso de la asamblea surgieron tensiones entre los mineros por la negativa de la Administración a recibir, con la comisión que les representará mañana, a Antonio García Correa, senador y secretario general del comité minero de UGT de Huelva. Algunos mineros, por otra parte, pretendían salir hoy de la galería. El resto de los compañeros les convenció de que, además de favorecer la reunión con Calvo Sotelo, respirar aire puro dos días podría ser importante para un futuro inmediato.

Los alrededores de la entrada a la mina de Cala fueron fortificados ayer por los mineros. No admiten la presencia de las fuerzas del orden y están listos para volver al Interior de la galería en el caso de que haya algún indicio de ocupación.

Los mineros hicieron público ayer un comunicado en el que subrayan que su abandono de la galería es coyuntural y condicionado a que el Gobierno atienda sus peticiones. Exigen que en cinco kilómetros a la redonda de la mina no se detecte la presencia de fuerzas policiales y piden que la representación que mañana se entrevistará con el presidente del Gobierno esté encabezada por el senador y secretario general del comité minero de UGT de Huelva, Antonio García Correa.

El abandono provisional del encierro es, según los mineros, un gesto de buena voluntad. "Queremos demostrar al Gobierno que somos unos caballeros".

Emoción a la salida

La salida de los mineros encerrados se produjo a las 18.30 horas y estuvo rodeada de escenas dramáticas. Las madres y esposas de aquellos hombres no pudieron aguantar sus nervios y rompieron a gritar y llorar nada más verles aparecer por la boca del túnel.Los mineros aparecieron agrupados. Su llegada hasta la explanada exterior de la mina la anunciaron sus linternas y el chapoteo de sus botas en los charcos de agua y barro de la galería. Nada más llegar al exterior, el secretario general de la Federación Minera de UGT, José Antonio Saavedra, leyó el mencionado comunicado a los medios de comunicación allí presentes. Inmediatamente se produjo el griterío de las mujeres. ("¡Ay, Dios mío; ay, Dios mío!. ¡Ay, hijo, que tienes una cara muy mala!; ¡ay, Dios, ay, Dios!..."). Una mujer llegó a desmayarse mientras besaba y se aferraba a su hijo.

Los mineros casi no articularon palabra. Se acercaron a sus mujeres y las besaron. Ante la presencia de los niños, aquellos hombres como castillos no pudieron reprimir el llanto. Solo lágrimas, besos y silencios. "Tenemos los hogares deshechos".

Paro general de una hora

Ayer se desarrolló un paro general de una hora, de 12 a 13 horas, en la provincia de Badajoz en apoyo de las reivindicación de la planta de pellets de Fregenal de la Sierra. La convocatoria del paro, realizada por los sindicatos y partidos políticos de izquierda -UCD retiro a última hora su convocatoria- fue secundada de forma generalizada. En Badajoz capital se realizó incluso una concentración de 6.000 personas, según fuentes sindicales, delante del Gobierno Civil.El paro de dos horas convocado para ayer en las zonas mineras de Badajoz y Huelva, se respetó a ultranza. En la provincia de Huelva, alrededor de 4.500 mineros, según las mencionadas fuentes, pararon de siete a nueve de la mañana.

En la casa del pueblo de Cala se recibieron, durante toda la jornada, informaciones de acciones de solidaridad y apoyo desde diversos puntos de España. Entre otras, se confirmó la concentración de los mineros de Antracitas de Besande y Antracitas de Velilla ante el Ayuntamiento de Velilla, Palencia.

Junta de Andalucía

Por su parte, la Junta de Andalucía, en su última reunión de la actual etapa preautonómica, ha exigido a la Administración la puesta en marcha sin dilaciones, y con arreglo a un estricto calendario, de la planta de pelletización, y el estudio posterior, con participación de las instituciones andaluzas y extremeñas afectadas, del proyecto de prerreducidos, informa José Aguilar.El consejo permanente de la Junta denuncia, con el voto en contra de los representantes de Unión de Centro Democrático, la actitud del Gobierno de marginar a las instituciones preautonómicas de Andalucía y Extremadura y haber estado improvisando de manera constante durante todo el proceso y adoptando compromisos solemnes al más alto nivel, "que han creado expectativas legítimas en los pueblos y zonas afectadas, que no pueden ser desconocidas ni soslayadas impunemente".