Francia prohíbe la entrada de ganado y carne fresca españoles

Siguiendo directrices de las autoridades sanitarias francesas, los aduaneros de ese país impiden el paso por la frontera de Irún de los transportes procedentes de España que contienen ganado y carnes frescas. El veto francés afecta igualmente a la entrada de carne fresca por parte de particulares, en lo que se denomina "régimen de viajeros". Los funcionarios franceses justifican su actitud alegando la posibilidad de que dichas carnes estén afectadas por la fiebre aftosa, aludiendo en tal sentido, al descubrimiento hace ya días en un matadero de Zorroza en Vizcaya, de una vaca afectada por glosopeda, enfermedad sumamente contagiosa entre los animales.Las autoridades sanitarias españolas se muestran sorprendidas por la prevención francesa, especialmente en lo que se refiere a su decisión de impedir el paso de los transportes industriales de carne, ya que éstas antes de ser exportadas deben someterse a controles sanitarios en nuestro país, merced al tratado entre ambas administraciones. La decisión francesa lleva implícita, pues, la sospecha de que dichos controles no sean efectuados en todos los casos con la debida eficacia.

Los exportadores de carnes, por su parte, que consideran igualmente injustificada esta actitud, recuerdan que el matadero en cuestión fue sometido a cuarentena durante tres días y totalmente desinfectado al tenerse conocimiento que uno de los animales allí muertos había estado afectado por la glosopeda. Paralelamente, se llevaron a cabo una serie de investigaciones en la provincia de Lérida, lugar de donde provenía el animal afectado, comprobándose que la enfermedad no se ha extendido.

La prohibición de importar carne fresca española afecta a un cupo de 125 toneladas trimestrales de ese producto, cantidad adjudicada a nuestro país por la Comunidad Económica Europea. Los exportadores afirman que, en el caso en que este cupo fuese aumentado y persistiese el veto, la situación del sector podría verse sumamente perjudicada. Al parecer, según estas fuentes, la Administración francesa ha adoptado idénticas medidas en lo que se refiere a la importación de carne fresca procedente de Alemania y Polonia, donde, al parecer, se han registrado también casos de animales afectados por esta enfermedad.