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Enfrentamiento entre los acupuntores leoneses y el Colegio de Médicos

El tratamiento de varios enfermos del síndrome tóxlco por el Instituto de Acupuntura de León ha desencadenado una polémica entre los acupuntores y un sector de los médicos, que pretenden demandar a los primeros por ejercicio ilegal de la medicina. También los acupuntores han anunciado públicamente que su terapia es capaz de curar la enfermedad, lo que se califica como "una barbaridad científica" por el Colegio Oficial de Médicos.

Facturas de los afectados

Las familias de los doce intoxicados por aceite de colza que han recibido hasta ahora tratamiento de acupuntura habían presentado días atrás al Ministerio de Sanidad unas facturas de 2,5 millones de pesetas -cuatro mil pesetas diarias por consulta- para hacer revertir el dinero hacia el Instituto, cuyos portavoces aseguran, a su vez, no poder continuar con el tratamiento, por razones económicas, si la Seguridad Social no se hace cargo de los honorarios. Al mismo tiempo se reservan el derecho a hacer públicos una serie de análisis privados, ya remitidos a Sanidad, en los que, supuestamente, se demuestra la eficacia de este tratamiento.Los acupuntores apoyan su postura en el testimonio de los enfermos, que aseguran haberse curado total o parcialmente de las secuelas del síndrome, mientras que los médicos aparecen avalados por su Colegio profesional y la comisión de seguimiento del ministerio. En la polémica, que ha sido ampliamente destacada por la Prensa local, subyace también un problema de intereses entre los acupuntores que disponen de titulación médica y el resto, agrupados en una asociación nacional de "diplomados" en escuelas de otros países. Actualmente, el aprendizaje de la acupuntura en España requiere únicamente el título de ATS o dos curso de medicina, tras lo cual siguen otros tres cursos de especialización.

Tanto los colegios de médicos como las comisiones de seguimiento del síndrome aseguran que la acupuntura se limita a aliviar los síntomas de esta enfermedad, sin curarla, mientras que el Instituto de León afirma que puede regenerar los órganos afectados.

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