Una bomba pasa dos controles de aeropuertos en EE UU sin ser detectada
Los aparatos de detección de dos importantes aeropuertos norteamericanos no funcionaron el martes cuando la maleta de Mary Jo Bradley, que contenía una bomba de relojería colocada por su marido, pasó por los controles sin ser detectada.Por motivos no aclarados, pero probablemente de índole familiar, Thomas Bradley, de veintisiete años de edad, técnico del ejército del Aire, colocó una bomba en la maleta de su mujer, que es suboficial de Estado Mayor y que viajó desde Washington hasta una base aérea en Texas. La señora Bradley no tuvo, sin embargo, problemas para pasar los controles de seguridad del National Airport de Washington los del aeropuerto de Dallas, en Texas.
Sólo cuando llegó a la base abrió su maleta y descubrió el artefacto explosivo, que, por motivos desconocidos, no llegó a estallar. "Era, sin embargo, una bomba auténtica", dijo un agente del FBI. Thomas Bradley ha sido detenido y acusado de transporte ilegal de explosivos y de intento de destrucción de un avión.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.