La distensión entre La Habana y Washington ha sido fugaz, según el vicepresidente cubano

Carlos Rafael Rodríguez, vicepresidente del Gobierno cubano, declaró ayer a la agencia France Presse que la distensión con Estados Unidos había sido "episódica y fugaz". Con relación a la crisis polaca, afirmó que "es lo menos grave que podía ocurrir", aunque matizó que no trataba de convertirse en abogado de una solución como la decretada por el régimen de Varsovia.El dirigente cubano declaró que "todo indica que la distensión entre Washington y La Habana, perceptible a finales del pasado año, había sido fugaz y episódica".

Añadió que a finales del pasado mes de noviembre era posible creer que el presidente norteamericano, Ronald Reagan, y sus secretarios y adjuntos habían accedido a la petición del presidente mexicano, José López Portillo, dirigidas a los dos países para acabar con "el terrorismo verbal". Sin embargo, Ia política internacional norteamericana "se caracteriza por cambios e incertidumbres que desconciertan e irritan hasta a sus propios aliados".

Carlos Rafael Rodríguez afirma que "hace pocos días, tras una calma aparente, Estados Unidos ha reanudado sus amenazas..., incluida la de utilizar la fuerza militar, recurriendo a hechos supuestos e indicaciones falsas, aun sabiendo que no corresponden a la realidad".

La situación polaca

Al analizar los acontecimientos de Polonia, el dirigente cubano manifestó que se trataba de "una desgracia en la historia de la lucha internacional por el socialismo y el comunismo". "Lo que ocurre en ese país", añadió, "es, ante todo, el resultado de la aplicación incorrecta de los principios del marxismo-leninismo y, en cierta medida, se trata de una consecuencia de esta aplicación incorrecta".

Sin embargo manifestó que "no es posible técnica ni políticamente hablar de golpe militar en un país en el que el Parlamento funciona y donde el Comité Central del Partido Comunista polaco, así como su Buró Político, continúan adoptando decisiones".

Afirmó también que "a nadie se le puede ocurrir que lo que sucede en Polonia es algo deseable, pero la adopción de medidas de excepción, con carácter temporal para permitir un reajuste que conduzca a la normalización en el marco del socialismo, es lo menos grave que podía ocurrir".

"No se trata de hacerse abogado de este tipo de soluciones" añadió, "pero no comprender la situación es colocarse abiertamente junto a quienes quieren destruir la base del socialismo en Polonia".

Con respecto a las relaciones entre los partidos comunistas de Cuba, por un lado, y los de España e Italia, Carlos Rafael Rodríguez dijo,que no podían aceptarse ciertas apreciaciones de los dos últimos sobre el papel histórico de la URSS y el sistema que impera en este país. "Esperamos que estos camaradas recitificarán sus posturas, derivadas de la situación coyuntural de Etiropa en que se mueven".

Carlos Rafael Rodríguez se felicitó por la decisión del Gobierno socialista fráncés de vender armas al régimen sandinista de Nicaragua.