Kounellis, uno de los creadores del 'arte pobre', presenta en Madrid una retrospectiva de su obra

Una insólita exposición retrospectiva de la obra del artista griego Jannis Kounellis (El Pireo), uno de los creadores del llamado arte pobre fue inaugurada ayer en el espacio de la galería Fernando Vijande de Madrid (Núñez de Balboa, 65, Madrid). La muestra, que ha llegado a España bajo el patrocinio de la Obra Cultural de la Caja de Pensiones (La Caixa), fue organizada originalmente, con carácter itinerante, por el Stedelijk Van Abbemuseum de Eindhoven (Holanda) y está prevista su posterior traslado, dentro de este año, a la Whitechapel Art Galery de Londres y al Staatliche Kunsthalle de Baden-Baden (República Federal de Alemania). La exposición reúne un número considerable de obras del artista, entre las que se encuentran muchas de sus realizaciones más célebres, lo que permitirá al público una visión global del trabajo y los intereses de Kounellis.

Es preciso resaltar un hecho que afecta a esta exposición y que, con carácter general, puede hacerse extensible a todas las exposiciones del artista, sean o no antológicas. Aunque las piezas concretas que aquí se incluyen van a ser básicamente las mismas en todo el itinerario de la muestra, la exposición resultante no será la misma en ninguno de los casos. Kounellis, en su proceso de trabajo, adjudica una importancia primordial a los problemas específicos que cada espacio, en el que ha de situar su obra, le plantea. En su caso, el espacio es entendido de un modo complejo, que atiende tanto a sus connotaciones físicas o arquitectónicas como a aquellas de tipo ideológico que se derivan de su situación histórica o del contexto cultural del país en cuestión.La exposición que, pese a estar formada.por piezas o montajes individuales, es considerada también por el artista como una única obra global, modificará su composición y su sentido en función del espacio en que se inserta. Por lo tanto, dentro de la concepción de Kounellis, una exposición como esta de Madrid se convierte en un acontecimiento único y, en lo fundamental, irrepetible.

Un personaje de la vanguardia

Kounellis viene siendo considerado como una de las Figuras más relevantes de la vanguardia artística europea de estas últimas décadas, lo que le convierte en personaje clave de un momento como el actual en que los fenómenos de la vanguardia europea ven incrementada su resonancia a nivel mundial, frente a lo que, hasta ahora, había sido un excesivo y casi exclusivo protagonismo del panorama norteamericano.Afincado en Italia desde 1956, Kounellis abandonó la pintura a principios de los años sesenta en favor de una postura creativa que se vio englobada en lo que el crítico Germano Celant bautizó como arte povera, aunque el propio artista se ha mostrado siempre escéptico ante dicha formulación.

De hecho, el término aludía prácticamente al empleo creativo, por un determinado grupo de artistas, de materiales inhabituales hasta entonces en el terreno de la plástica: trapos, madera, yeso, piedras...

Básicamente, muchos de esos materiales siguen aún hoy presentes en el trabajo de Kounellis pero se articulan en un complejo juego metafórico, rico en alusiones culturales, mediante cl cual traduce su propia visión del mundo.

El espacio, el sonido y el fuego

A través del interés que, según hemos visto, despierta en Kounellis la relación entre la obra y el espacio, su trabajo se hizo extensible a terrenos cercanos a la creación de ambientes y performances. En éstos, aderriás de los elementos meramente visuales, se incorporaban también otros de origen sonoro. Una clerta constante que, de algún modo, se ha convertido en característica de un amplio sector de la obra del artista, ha sido el empleo del fuego, ya fuera mediante su presencia física en la obra, o por la huella, dejada por él en otro soporte, tal y como el espectador podrá ver en varias de las piezas fundamentales que se presentan en esta muestra.La exposición ha sido acompañada por un catálogo que recoge básicamente, amén de una extensa documentación visual sobre el conjunto del trabajo de Kounellis, un texto crítico -y a la vez evocativo en un sentido más complejo- de R. H. Fuchs, director del Van Abbemuseum, quien comparte con el artista no sólo el interés por ciertos problemas creativos, sino también una determinada visión de la situación política mundial del panorama artístico.

Fuchs es, asimismo, el director de la presente edición de la Documenta de Kassel, a celebrar en este año, y que es sin duda la más importante convención internacional sobre la creación artística que actualmente existe.