La guía de plantas medicinales de Navarra, un tratado de medicina popular

La Caja de Ahorros de Navarra ha editado, dentro de su colección dedicada a la naturaleza y el medio ambiente, el libro Plantas medicinales, escrito por el catedrático del Instituto Luis Miguel García Bona, que es un completo estudio sobre la flora medicinal de la provincia. Del libro, que se ha repartido entre los clientes de la entidad de ahorro, se han tirado 15.000 ejemplares.«Con la presente obra», se señala en la introducción de la misma, «pretendemos mostrar una faceta más de la naturaleza de Navarra, su flora medicinal y, en segundo lugar, mostrar cuáles son las reales características y virtudes de éstas, sin embaucamiento ni deseos de lucro, el papel que juegan en la medicina moderna y en general cuál es la base y el porvenir de este tipo de medicina del pueblo, para que cada cual pueda juzgar y comprender su historia y su resurgimiento actual y, en consecuencia, las utilice o las deje de utilizar; pero no como un remedio in extremis, sino como un remedio de las afecciones para las cuales su uso es más adecuado que el de otros fármacos».

García Bona señala en su libro que el resurgimiento de las plantas naturales es un hecho, ya que, entre otras razones, no introducen nuevas toxinas en el organismo y, en ocasiones, sus virtudes no han sido superadas por los fármacos ni por otras formas modernas de tratamiento. Así, en el libro se señalan las principales acciones de las plantas medicinales, desde la acción depuradora del organismo, los resultados en el sistema nervioso, circulatorio y muscular, las actuaciones en el aparato reproductor femenino o sus cualidades vitamínicas.

Sin embargo, García Bona señala que la fitoterapia casera requiere, en primer término, un buen conocimiento de la acción y propiedades de cada una de las plantas, una información exacta sobre el medio en el que se desenvuelven (recogerlas en el momento adecuado, transportarlas sin alteraciones, conservarlas correctamente, etcétera) y una administración correcta para aprovechar sus principios activos y conseguir una mayor eficacia en las afecciones que se pretendan tratar.

150 plantas medicinales

Después de estos prolegómenos, que el libro recoge con profusión y exactitud, García Bona presenta en su obra 150 plantas medicinales silvestres (se considera que en la provincia existen del orden de las seiscientas especies distintas con propiedades medicinales), escogidas en base a los criterios de abundancia y un mayor interés medicinal. Cada una de estas fichas, ilustrada con dos fotografías que reflejan la planta completa y en detalle, ofrece la distribución y los principales hábitat en los que se encuentra la planta, dónde puede encontrarse, sus principales características medicinales y la composición química conocida.De otra parte, el libro de García Bona reseña 37 plantas cultivadas en Navarra, que pueden tener, de igual modo, un uso medicinal. En este apartado se citan, entre otros, al ajo, la cebolla, la berza, el pimiento, la calabaza, la alcachofa, el abeto, el nogal, el almendro, la patata, etcétera. El volumen sobre las plantas medicinales de Navarra tiene un último capítulo dedicado a las enfermedades más corrientes, ordenadas en siete apartados, según el aparato o sistema del organismo al que afecten. Cada enfermedad es descrita de forma breve, se explican las causas y los síntomas más frecuentes y, a continuación, el libro ofrece el tratamiento que se puede seguir para su curación.