Los portavoces oficiales polacos aseguran que no hay casos de insubordinación en el Ejercito

Los portavoces del Gobierno y del Consejo Militar para la Salvación Nacional en Polonia se esfuerzan por asegurar que el Ejército actúa de forma unitaria y que "no ha habido casos de insubordinación".Al mismo tiempo crecen las especulaciones sobre la ausencia en los medios audiovisuales polacos del presidente del Consejo Nacional, general Wojciech Jaruzelski.

Especulaciones

La falta de informaciones concretas da rienda suelta a las especulaciones, que suelen ir acompañadas de los "deseos" de la fuente que proporciona las informaciones. La repetición en los últimos meses, hasta la saciedad, de la frase "el Ejército polaco no dispara sobre polacos" plantea la duda sobre la fidelidad de las tropas a las severísirnas normas del "estado de guerra". En algunos casos se habla de deserciones.

El Consejo Militar gano monolítico, y existen esfuerzos clasificatorios entre duros, moderados y profesionales, con el toque colorista de la presencia en el Consejo del coronel Miroslaw Hermaszewski, el astronauta Polaco, al que la voz popular había puesto el mote de Laika Polaco, en recuedo a la perrita que fue lanzada en su día al espacio. Entre los militares del Consejo figura el almirante Ludwik Janczyszyn, jefe de la Marina de guerra, que hace un año, en la inauguración del monumento a los caídos de la matanza del año 1970, a la puerta del astillero Leninlen Gdansk, fue el único representante de las autoridades que cosechó algunos aplausos y no fue recibido con un silencio glacial. Los obreros recompensaron así su negativa, en agosto de 1980, a emplear las tropas contra los huelguistas.

También figura en el Consejo el coronel retirado Roman Les, el presidente de la Asociación de Oficiales de la Reserva, organización que se distingue por sus tendencias chovinistas y antijudías, que en los días posteriores al golpe militar del pasado 13 de diciembre tuvieron un cierto eco en Radio Varsovia.

Este espectro dentro del Consejo Militar permite suponer que las. cosas ño funcionan de forma absolutamente monolíti.ca a nivel de tropa.

Palo y zanahoria

Se hacen cábalas incluso sobre la ausencia del general Jaruzelski desde su primera aparición al anunciar la toma del poder y la declaración de estado de guerra. Los portavoces en Varsovia aseguran que el general no se movió de la capital polaca, y presidió todas las reuniones del Consejo. Los portavoces añaden que aparecerá "a su debido tiempo", lo que no servirá para aplacar las especulaciones de que Jaruzelski podría haber dejado paso a los más "duros" dentro del Consejo Militar.

Hasta ahora, los hechos concretos son que los militares intentan una política de "palo y zanahoria", a base de prometer la vuelta a la normalidad si se pacifica el país y mantener la amenaza y el terror de la población como armas disuasorias.

Dentro d,e las medidas "populares" hay que registrar el anuncio de que desde el próximo 1 de enero el salario mínimo subirá de 2.400 zlotys (unas 7.200 pesetas al cambio ofilcial) a 3.300 zlotys (unas 9.900 pesetas). También se subirá el subsidio familiar por número de hijos.

El general Gronicki, presentado como un "íntimo consejero de Jaruzelski", dijo en una entrevista televisada que no se puede imaginar que a NValesa le ocurra algo, y tampoco una Polonia sin el sindicato independiente Solidaridad después de levantada la ley marcial.