Ha fallecido el director de cine francés Abel Gance

El cineasta francés Abel Gance, uno de los últimos supervivientes de la época del cine mudo, y que posteriormente incrementó su fama como uno de los directores más vanguardistas y espectaculares de la historia del séptimo arte, falleció anoche en París, a la edad de 92 años. Gance había sido hospitalizado el pasado día 1 de noviembre, a causa de un edema pulmonar. A pesar de los cuidados suministrados, Abel Gance se fue debilitando, dada su edad, hasta que en la tarde de ayer su hija adoptiva, Clarisse, decidió trasladarle a su domicilio, donde falleció pocos minutos después del traslado.

Abel Gance nació en París el 25 de octubre de 1889. Tras haber cursado estudios secundarios, se interesó por la literatura, escribió poemas y obras teatrales -como Un dedo In el teclado o La victoria de Samotracia-, y trabajó como actor en teatro y cine, siempre en pequenos papeles, pasando finalmente a escribir argumentos para la pantalla.Fue un autodidacta, admirador de los clásicos gríegos, de Bacon, Schopenhauer y Nietzsebe. Trabajó con Max Linder, y realizó ya en 1911 su primera película con su propia productora: El dique o Cómo salvar Holanda. Después siguieron El negro blanco, A Iguien anda sobre el techo y La máscara del horror, todas ellas en pocos meses.

Sus experimentos comenzaron realmente con una obra que no se estrenó, La locura del doctor Tube, en 1916. De mala salud, a pesar de su larga vida, no fue movílizado en la primera guerra mundial. Mater dolorosa, La décima sinfonía Y Yo acuso, de tono pacifista, y que llegó a rodar en tres versiones distintas. cimentaron su fama en la. posguerra. Su grandilocuencia, no exenta de convencionalismos, le convirtió en el primer realizador francés de la época. Después realizó La rueda, una película gigantesca en un prólogo y seis capítulos, que fue una superproducción de la época. Pero su obra maestra fue Napoleón, de 1926, donde introdujo la triple pantalla -cada una con acción diferente, de tal manera que el espectador elige la manera de ver el filme- y la toma de vistas móvil.

Inventó también la polivisión, el pictógrafo y la perspectiva sonora, todo ello antecedente de otras técnicas más modernas. En el cine posterior realizó obras como El fin del mundo, Cyrano y D'Artagnan y A usterlitz, entre otra veíntena de películas. Escribió La belleza a través del cine (1926) y Prisma (1930). Era comendador de la Legión de Honor y había recibido numerosos premios. Este mismo año, su Napoleón volvió a las salas en Estados Unidos y Europa, de la mano de Francis Ford Coppola, que efectuó un nuevo montaje de la obra, que en Italia fue proyectada en una pantalla de 36 metros. La película original duraba cuatro horas, y en ella intervinieron 6.000 extras y 2.000 caballos. Pero en realidad, Napoleón visto por Abel Gance -su verdadero título- fue un proyecto incompleto, del que sólo se pudo rodar una pequeña parte.