El Parlamento iraní ratificará hoy el nombramiento del nuevo primer ministro

El nuevo presidente iraní, Mohamed Alí Rayal, sometió ayer a la aprobación del Parlamento (Majlis) el nombramiento como primer ministro de Mohamed Javad Babonar, secretario general del Partido de la República Islámica (PRI). El nombramiento será debatido hoy en el Parlamento iraní y probablemente será aprobado por una amplia mayoría, ya que el PRI controla el 80% de los escaños de la Cámara. El hoyatoleslam Mohamed Javad Bahonar, de 47 años, era ministro de Educación en el último Gobierno iraní y secretario general del Partido de la República Istámica desde la muerte de su fundador, el ayatollah Behesti, en el atentado que, a finales de junio, costó la vida a setenta personalidades políticas del país.

Bahonar estudió teología con el imán Jomeini y cursó estudios de filosofía y pedagogía en varios países occidentales, entre ellos Inglaterra y Estados Unidos. Raya¡, recién elegido presidente de la República y hasta ahora primer ministro, presentó el nombramiento de Bahonar en una carta dirigida al Majlis que fue leída ayer por su presidente, el hoyatoleslam Rafsanjani.Este último acusó ayer al ex presidente Abolhassan Banisadr de estar vinculado a los terroristas que han provocado los últimos atentados en Irán y que causaron más de una docena de muertos. Uno de ellos se produjo a sólo doscientos metros del despacho del primer ministro, cuando una potente bomba explosionó en un automóvil estacionado y mató a una persona y produjo quince heridos graves, según cifras oficiales. La otra explosión se produjo en Kermanchah, al oeste del país, y causó trece muertos y veintinco heridos.

Para Rafsanjani no existe la menor duda de que el antiguo presidente está conectado con este "terrorismo ciego, sin precedentes en Irán", al igual que lo están esos grupos que declaran desde París su intención de "expulsar de la escena política a los compañeros del imán".

Veintiste ejecuciones de oponentes al régimen islámico fueron anunciadas ayer por la agencía oficial Pars, que ya se había hecho eco de otras catorce ejecuciones la víspera. Más de 300 militantes de izquierda han sido pasados por las armas desde la destitución de Banisadr.

Este afirmó el lunes, en unas declaraciones concedidas al diario francés La Matin, que su fuerza radica en su legitimidad, y acusó a Estados Unidos y a la URSS de favorecer el caos en Irán. Banisadr, que reside en Francia, donde le fue concedido asilo político, acusó al partido comunista iraní (Tudeh) de trabajar para los sovíéticos, y dijo que "el juego de los norteamericanos" consiste en esperar la muerte de Jomeini, azuzar las diferencias internas y que, cuando el país esté debilitado y falto de su clase política, tratarán de imponer un régimen fuerte y a su servicio. Sapur Bajtiar, último primer ministro del sha, también asilado en Francia, tiene la "biografía ideal" del hombre que podría ser puesto al frente de ese régimen fuerte y fiel a Washington, en opinión del ex presidente.

Suecia no dará asilo político a Banisadr

Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Suecia puntualizó ayer que el ex presidente Banisadr no tiene derecho al asilo político en este país, una vez que lo ha obtenido en otro, Francia en este caso, según informa desde Estocolmo Ricardo Moreno.

La misma fuente oficial desmintió que Banisadr hubiera sido invitado privadamente por el dirigente socialista Olof Palme a visitar Suecia. Según informó al Ministerio el propio Palme, él no ha tenido ningún contacto con el ex presidente iraní desde que éste fue destituido de su cargo.

La información sobre un supuesto traslado de Banisadr a Suecia fue publicada por el semanario británico The Sunday Times, que le entrevistó en París. Según el periódico, Banisadr tenía intención de trasladarse a Suecia o Austria para poder desarrollar una actividad política contra Jomeini, una vez que el Gobierno francés decidió poner restricciones a las actividades del ex presidente iraní.

El jefe del Gobierno austríaco, Bruno Kreiski, dijo ayer en una entrevista que Banisadr puede obtener asilo político en Austria si así lo desea, pero con la condición de que se abstenga de toda actividad política.