Ofertas de inversión de 150.000 millones en las nuevas áreas de expansión industrial

Las medidas del Gobierno sobre beneficios fiscales para las áreas de expansión industrial, plasmadas en cinco decretos aprobados ya por el Ejecutivo y publicados en el Boletín Oficial del Estado (BOE) han tenido una buena acogida pese a la crisis industrial y la atonía inversora, según el subsecretario de Ordenación Territorial y Medio Ambiente del Ministerio de Obras Públicas, Santiago Arauz de Robles. En la actualidad ya hay ofertas de inversión de más de 150.000 millones de pesetas.Estos decretos tienen como destinatarias regiones menos desarrolladas como Galicia, Andalucía, Extremadura, Castilla-León y el polo industrial de Oviedo.

En los concursos abiertos para instalar industrias en estas áreas, acogiéndose a los beneficios fiscales concedidos, se han recibido para Andalucía 274 expedientes, con una inversión de 98.000 millones de pesetas y la creación de 62.000 puestos de trabajo, directos e indirectos. Para Galicia se han presentado 89 expedientes, con una inversión de 9.609 millones y creación de 10.000 nuevos puestos de trabajo. Estos expedientes ya precalificados deberán ir a un próximo Consejo de Ministros para su aprobación.

El subsecretario de Ordenación Territorial ha manifestado a Europa Press que la filosofía de las áreas de expansión industrial, en contraste con la política de polos de desarrollo del régimen anterior, es buscar que la industria se ubique en poblaciones de tamaño medio, con mano de obra no utilizada, infraestructura suficiente y con potencialidades de recursos naturales, de forma que la industrialización sea una solución para esas zonas.

Beneficios para las empresas

Entre los beneficios para las empresas que se acojan a las áreas de expansión industrial figuran los siguientes: expropiación forzosa de los terrenos necesarios para la instalación o ampliación; adquisición de suelo industrial propiedad del Instituto Nacional de Urbanización; reducción hasta el 95% de los impuestos siguientes: derechos arancelarios y del impuesto de compensación de gravámenes, interiores que graven importaciones de bienes de equipo y utillaje que no se fabrique en España, de la cuota de licencia fiscal durante el tiempo de la instalación, del impuesto de tráfico de empresas que grave la importación de bienes de equipo que no se fabriquen en España y de cualquier tasa o arbitrio municipal sobre instalación o ampliación de instalaciones; preferencia en la obtención de crédito oficial, y subvención de hasta el 20% de la inversión en capital fijo, con cargo a Obras Públicas, para adquisición de terrenos, urbanización y cuantas inversiones productivas sean necesarias para la instalación, ingeniería de proyecto, proceso y producto.Las empresas que reciban beneficios podrán percibir además una subvención de un 5% más para inversión fija.