Fracasa la mediación de Arafat sobre el Sahara entre Argel, Trípoli y Rabat

El presidente de la Organización para la Liberación de Palestina, Yasir Arafat, fracasó este pasado fin de semana en un desesperado intento de obtener el acuerdo de los dirigentes argelino, marroquí y libio para «moderar sus diferencias» en torno al conflicto del Sabara occidental y evitar que éstas «abran una nueva brecha en el mundo árabe».

Argelia y Libia han rehusado dar el carácter de mediación a la iniciativa del jefe de la resistencia palestina y han reafirmado que abogarán por el respeto a la Carta de la Organización para la Unidad Africana (OUA) en la próxima cumbre de Nairobi.Arafat viajó a las tres capitales norafricanas para entrevistarse con el presidente argelino Chadli Bendjedid, el rey Hassan II de Marruecos y el presidente libio Muammar el Gadafi. El dirigente palestino sostuvo dos encuentros con el jefe del Estado argelino, al término de los cuales; una nota de la agencia oficial de Prensa argelina, sin citar en ningún momento la iniciativa de Arafat, calificó de «maniobras de diversión» los rumores en torno a una mediación entre Argel y Rabat a propósito del Sahara occidental.

Una nueva brecha debe ser evitada

El dirigente palestino convino que el término mediación era prematuro, en la medida en que Argel lo rechaza categóricamente, sobre todo, a escasos días de la cumbre africana de la OUA que debe debatir el conflictivo tema de la adhesión de la República Arabe Saharaui Democrática (RASD). La argumentación expuesta por Arafat ante Chadli y Gadafi se redujo a lo siguiente: «El mundo árabe no puede permitirse una nueva brecha en su seno, que incidiría en desprestigio suyo y causaría un grave revés al problema más sagrado de los árabes: la causa del pueblo palestino y la lucha contra Israel. Una ruptura total entre vos otros, a causa del Frente Polisario, es un falso paso que debe ser evitado ... »

Argelinos y libios han mostrado su sorpresa ante la aparente ignorancia mostrada por Arafat del tema del Sabara occidental. La OLP, por iniciativa de su presidente, siggue sin reconoceral Polisario ni a la RASD, violando implícitamente las resoluciones de la cuarta cumbre del Frente de la Firmeza, celebrada en Tripoli en abril de 1980, que decidió reconocer a la RASD y propuso invitar a los demás países árabes a reconocerlas.

Argelia estima que no debe plantearse el tema corno un objeto de elección entre el problema palestino y el del Sahara occidental y que, en consecuencia, no existe incompatibilidad entre uno y otro, ya que de lo contrario se estaría sembrando la confusión.

Sin afirmarlo llanamente, parece obvio que tanto Chadli como Gadafi han estimado inoportuna, por lo menos, la iniciativa de Arafat, aunque ninguno de ellos rechaza la idea-base de hacer todo lo posible por impedir que Marruecos se aísle de la OUA y de una fracción del mundo árabe, a causa del Polisario.

El Frente Polisario, por su parte, a pesar de los esfuerzos realizados para normalizar sus relaciones con la OLP, sólo ha logrado ser re conocido por dos fracciones radicales de la misma: las dirigidas por Nayef Hawameth y Georges Habache.