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España y la victoria de Mitterrand

( ... ) Puedo, por mi parte, atestiguar que las Fuerzas Armadas españolas han acogido también con sangre fría la victoria de Mitterrand.Algunos observadores esperaban lo peor: ¿los sectores golpistas, como aquí se les nombra, no iban a encontrar en esta amenaza potencial de contagio marxista venida del Norte un pretexto suplementario para un nuevo golpe, más logrado que el del 23 de febrero?

Esos temores no parecen justificados por el momento. La extrema derecha y los nostálgicos del franquismo que se expresan en las columnas de El Alcázar tratan la elección francesa con desprecio.(...)

No podemos imaginarnos el capital de decepción, y hasta de odio, que la política francesa parece haber acumulado. La actitud de Valéry Giscard d'Estaing, que había querido presentarse como el padrino de la joven democracia española para luego negarle su ayuda en los momentos más peligrosos, es juzgada con severidad. ( ... )

Entre los socialistas de Felipe González es como si ya no hubiese Pirineos. (...)

Naturalmente, en lo que respecta a la CEE no se eliminarán ciertos problemas económicos de un golpe. Pero al menos un diálogo se establecerá, se buscarán soluciones. Esto no existía con Giscard.

No pedimos, por ahora, la entrada inmediata de España en el Mercado Común; es imposible. Pero sí queremos consolidar la democracia es capital y urgente que estemos presentes bajo una forma política. ( ... )

La necesidad o simplemente las ventajas de una mejor cooperación con Francia podría abrir al PSOE las puertas de una coalición gubernamental que no cesa de reclamar y que UCD les cierra.

Es verdad que el Ejército duerme con los ojos abiertos. (...) El objetivo del terrorismo es el mismo: provocar una sublevación militar que acabará con la democracia.(...)

¿Qué ha detenido a las espadas? Tal vez esos dos minutos impresionantes de silencio que han inmovilizado a toda España.

18 de ma

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