Old Vic, 160 años después

Vic es una abreviatura de Victoria; el Old Vic era en realidad el Royal Victoria Hall and Coffee Tavern, y según el pudor y virtud de la augusta dama fue un templo donde el music hall era honesto y bien pensante y los licores estaban abolidos. Más tarde se liberó, siempre dentro de una decencia fundamental; dió algo de ópera, alguna película, conferencias y mucho Shakespeare, en cuyo nombre siempre se ha podido hablar de todo. Pasó por las bombas alemanas, fue reconstruido, y, en 1950, volvió a su domicilio -Waterloo Road-, siempre devoto de Shakespeare, pero ya más abierto hacia otros clásicos. En 1963 se convirtió en un teatro nacional. Teóricamente, el Old Vic -con su compañía estable- dejó de existir para dejar paso a la New Theatre Company, que dirigió sir Laurence Olivier. Ya entró en él un repertorio moderno.No hace mucho tiempo vino a España una breve parte de su compañía para mostrarnos la obra de un joven autor; se apreció en la compañía el viejo arte de decir bien las cosas, la capacidad para hacer íntimo un espacio escénico, la sencillez de realzar un texto. La National Company representaba el viejo sueño de Garrick, que hace dos siglos y medio soñaba con crear algo parecido a un teatro nacional, bajo la protección de la corona.

Pero desde el mismo momento en que albergó a la compañía nacional, el Old Vic estaba perdido. Había otros planes; y otros planos. Los de un nuevo teatro, también en el South Bank, que abandonara el local victoriano.