Notable actuación de Juan Mora
Se dice que los novilleros vienen a la plaza de Madrid a examinarse. Cada uno tiene que desarrollar dos elecciones, extraídas al azar del incógnito mundo de los toriles. Y de cómo reciten el contenido de la materia depende la nota que el público les otorga.El novillero Juan Mora, que no tuvo suerte en su primer examen de mayo de 1979, ha obtenido notable en esta «repesca» efectuada dos años después. Con un toreo hondo, interprentado a veces con sentimiento e intuición artística.
Sus compañeros de examen no consiguieron calificaciones tan halagüeñas. Román Lucero asustó a los clientes con su toreo encimista, falto de mando, torpe y codillero. Fue revolcado un millón de veces Y terminó con el traje hecho flecos.
Plaza de Las Ventas
Cinco novillos de Jiménez Pasquau con presencia y mansurrones y uno de Pío Tabernero en cuarto lugar, blando y manejable. Juan Mora: palmas. Vuelta. Román Lucero: división. Vuelta protestada. Manolo Martín: silencio. Palmas.
El catalán Manolo Martín hizo bostezar hasta al palo de la bandera, a base de un toreo insípido y de un insistir en terrenos inadecuados.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.