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El director y dos profesores del orfelinato de Armilla, trasladados por el asunto de los malos tratos a los niños

Santiago Sánchez Lázaro, director-administrador del hogar infantil del Niño Jesús, de Armilla, dependiente de la Diputación Provincial de Granada y objeto de una interpelación parlamentaria sobre la existencia en el mismo de supuestos malos tratos a los alumnos y otras irregularidades del régimen interno, ha sido trasladado como administrador -tras dimitir, al parecer, voluntariamente- al Hospital Psiquiátrico de la Virgen. Al frente del llamado orfelinato de Armilla, Sánchez Lázaro será sustituido, por decisión personal del presidente de la Corporación granadina, el centrista José Sánchez Faba, por la misma persona que él va a relevar en la administración del Psiquiátrico, Francisco Piles.

Otros dos funcionarios han sido igualmente removidos de sus puestos habituales de trabajo en el centro benéfico de Armilla, esta vez con carácter forzoso, también por orden del presidente de la Diputación. Se trata del profesor de EGB José María López, promotor de la denuncia que originó en su día la interpelación al Gobierno de la diputada socialista María Izquierdo, que ha sido enviado como administrativo al centro de formación profesional, y del educador Santiago Sánchez, hijo del propio administrador que se encuentra actualmente expedientado como autor de los malos tratos infligidos a tres alumnos, y que ha sido trasladado al centro de subnormales, con la misma función educativa que desempeñaba en el orfelinato.El traslado de estos funcionarios ha provocado una dura reacción del grupo socialista de la Diputación granadina, que, en una nota publicada el domingo, consideraba «inadmisible que estas decisiones se tomen de forma unipersonal, sin conocimiento de las comisiones correspondientes y sin que se hayan resuelto aún los expedientes en curso». Los diputados socialistas se declaraban, además, especialmente indignados respecto al caso de José María López Rodríguez.

Por su parte, López Rodríguez, que en la actualidad estaba encargado de las clases de inglés de la segunda etapa de EGB, así como de las de perfeccionamiento de este idioma para los internos que han terminado la etapa escolar y se encuentran a la espera de empleo o de su incorporación al servicio militar, no se muestra dispuesto a aceptar («cuando sólo falta un mes para los exámenes finales») el cambio de centro y función decretado unilateralmente por el presidente, Sánchez Faba. «He denunciado como improcedente en la Delegación de Trabajo la orden de traslado», declaró ayer a EL PAIS, «por entender que modifica radicalmente las condiciones laborales de mi actual contrato de trabajo ».

La adopción de estas medidas disciplinarias ha venido, asimismo, a agudizar los ya de por sí serios problemas de convivencia existentes en el interior del hogar infantil de Armilla desde que el asunto de las irregularidades en el funcionamiento del centro trascendió a la opinión pública En este sentido, resulta ilustrativo el enfrentamiento a voces que tuvo lugar el jueves pasado en el patio del orfelinato entre un grupo de unos veinte niños pequeños, de edades comprendidas entre los seis y los doce años, que se manifestaban con carteles en favor de Santiago Sánchez Lázaro, y algunos chicos mayores que, tras manipular y cambiar las leyendas de los carteles en contra del administrador, impidieron a los otros desfilar por delante de su casa, y acusaron a las monjas de ser las organizadoras de la marcha.

Según los propios alumnos, algunas religiosas se dedican últimamente a inculcarles, en especial a las niñas, consignas tales como que «el demonio ya no tiene cuernos, sino barbas», en una clara alusión al profesor de inglés, al que culpan de la marcha de «el bueno de don Santiago». Para éste, sin embargo, los chicos que han declarado en contra de su hijo no merecen credibilidad, por tratarse de unos perdidos.

Por otro lado, a pesar de que en el informe de la comisión de encuesta se aseguraba que «no se ha constatado la existencia de discriminación en el hogar infantil por razón de sexo», lo cierto es que las niñas continúan haciendo, a diferencia de los chicos, no sólo las faenas de limpieza en sus propias salas, sino también en la capilla y el pasillo de la comunidad religiosa. Mientras tanto, una propuesta realizada por parte del profesorado del centro, para que se habiliten bibliotecas, salas de juegos y comedores conjuntos, ha sido rechazada como inadmisible por el presidente de la comisión de encuesta de la Diputación. «En pocos meses», ha declarado el diputado provincial centrista, «podíamos tener aquí a la Prensa denunciando casos de embarazos, pues, por mucho que se quiera, las niñas son física, e incluso psíquicamente, diferentes a los niños».

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