Iñigo Cavero: "Ni el Gobierno ni el Estado pagarán nada por la devolución del «Guernica»"

Hoy, cuando se cumplen ocho años de la muerte de Pablo Picasso en el exilio francés, comienzan en Nueva York las negociaciones oficiales para conseguir en un plazo mínimo el traslado del Guernica a España. El Museo de Arte Moderno de Nueva York, donde se halla en depósito el más famoso cuadro del genial autor, se muestra reticente a devolver la obra. Se ha llegado a especular, incluso, con la posibilidad de que al final el Estado español tenga que desembolsar dinero por el Guernica, extremo este que ayer fue desmentido rotundamente por Iñigo Cavero.

«Ni el Gobierno ni el Estado español van a pagar nada a nadie por el traslado del Guernica. Por el contrario, puede ser que nos tengan que pagar a nosotros si se tarda en resolver este asunto más de la cuenta», dijo ayer el ministro de Cultura, Iñigo Cavero, cuando un redactor de EL PAIS le preguntó acerca del rumor que existía sobre la posibilidad de que el Gobierno pagara por la restitución del cuadro tanto a los herederos de Picasso como al Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA).Con la presentación hoy ante el director del MOMA de los documentos que acreditan que el cuadro es propiedad del Estado español, se inicia uno de los períodos de negociación más duros y a la vez, delicados en el proceso de recuperación de la obra del pintor español. La fecha de solicitud oficial de devolución del cuadro parece que también se ha elegido a propósito, dado que hoy se cumple el octavo aniversario de la muerte del autor del Guernica.

La delegación española encargada de realizar las pretendidas últimas gestiones, integrada por el abogado del Estado y secretario general técnico del Ministerio de Cultura, Joaquín Tena, y por el diplomático Rafael Fernández Quintanilla, ha acudido a Nueva York con una actitud más enérgica que la mantenida hasta ahora.

«Venimos con la intención de evitar la reclamación judicial», ha declarado Rafael Fernández Quintanilla, «y a llegar a un arreglo amistoso con el museo».

Según el ministro de Cultura, esta semana que seguirá a la presentación de la documentación será fundamental, aunque la devolución podría retrasarse todavía algo si se lleva a los últimos extremos la cláusula que dejó Picasso, referida a que la devolución se deberá hacer cuanto antes; a partir de la solicitud de traslado, pero siempre antes de seis meses.

Sobre las medidas que tomará la delegación española, el ministro de Cultura ha añadido que primero se estudiarán con el director del MOMA las posiciones razonables que existen sobre el tema del Guernica, y no ha descartado, si no desaparecen las difícultades actuales, la posibilidad de acudir incluso a la vía judicial.

La última postura manifestada por el director del MOMA es la de que ni entra ni sale en la cuestión, pero se atiene a una serie de cartas que le han dirigido los abogados de algunos herederos. En estas cartas, los herederos de Picasso recurren a los derechos morales que dicen tener sobre el cuadro, y señalan que no se han cumplido ciertas cláusulas que puso el pintor, entre otras, la de que la democracia todavía no está asegurada en España.

El director del MOMA, William Rubin, teme, por lo que ha oído hasta ahora de los documentos que van a presentar los delegados españoles, que no exista ninguna prueba concluyente (como podría ser el recibo mismo firmado por Picasso al pagarle el cuadro) de que el cuadro pertenece al Estado español, y ha añadido que tiene la impresión de que el Gobierno español ha perdido la paciencia.

En medios próximos al museo norteamericano se ha indicado que la restitución del cuadro era algo que se daba como seguro en el mes de febrero, antes del intento del golpe de Estado, pero que este hecho enfrió las posiciones de algunos de los herederos y que ahora el director del museo quiere tener en cuenta, amparándose en los derechos morales, figura jurídica que sólo contempla la legislación francesa.

Justo a los ocho años de la muerte de Picasso, y cuando el tema del Guernica se encuentra en el momento más delicado, su obra en general sube de cotización. El día 21 de mayo próximo se va a subastar en Londres uno de sus autorretratos, pintado en 1901. Este cuadro será la gran atracción de la subasta organizada por Sotheby's.