El ministro de Defensa se entrevistó con los capitanes generales de Sevilla y Zaragoza

El ministro de Defensa, Alberto Oliart, recibió ayer a los capitanes generales de la II y V regiones militares (Sevilla y Zaragoza), tenientes generales Merry Gordon y Elícegui Prieto, respectivamente, dentro de la serie de contactos que viene realizando con el mando militar con motivo del relevo al frente del departamento. Oliart, que inició sus encuentros con los principales responsables de las zonas militares el pasado martes, mantendrá conversaciones durante la próxima semana con todos los altos mandos de las Fuerzas Armadas que aún no han acudido a su despacho.El ministro de Defensa no recibe hoy a ningún capitán general por celebrarse precisamente Consejo de Ministros, pero el lunes tiene previsto cambiar impresiones con los máximos responsables de la III y IV regiones militares (Valencia y Cataluña), tenientes generales Pascual Gálmez y Arozarena Girón. El martes acudirán al Ministerio de Defensa los tenientes generales Campano López (Valladolid), Fernández Posse (La Coruña) y De la Torre Pascual (Baleares).

Precisamente, Alberto Oliart ya ha recibido en los últimos días a los tenientes generales González del Yerro (Canarias), Quintana Lacael (Madrid) y Polanco Mejorada (Burgos), así como al presidente del Consejo Supremo de Justicia Militar, teniente general Alvarez Rodríguez.

Oliart, que ayer se entrevistó con el presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, para darle cuenta, entre otros aspectos, de la serie de contactos que viene manteniendo con los responsables del mando militar, ha hecho unas declaraciones a Radio Nacional de España en las que pone de manifiesto que se ha encontrado con unas Fuerzas Armadas llenas de un gran sentido de la disciplina y de la lealtad.

Indicó que en su política hacia el Ejército se va a apoyar en la Junta de Jefes de Estado Mayor y en los cuerpos nacionales consultivos de las Fuerzas Armadas, y añadió que se van a poner todos los medios para que no vuelvan a ocurrir hechos como los de los días 23 y 24 de febrero. «Las posibilidades en estos momentos son mucho menores de que ocurran. El factor sorpresa es un factor de éxito grande, pero se llevó a cabo entre muy pocas personas, asustó y preocupó al país, pero existió algo bueno, como ha sido la reacción que tenemos en estos momentos. Ahí está la manifestación multitudinaria en toda España».

El ministro de Defensa dijo que en aquellos días el 99% de las Fuerzas Armadas permaneció fiel al ordenamiento constitucional, y precisó que «el golpe del 23 de febrero es producto de la cristalización de una serie de malestares, en la base de los cuales están el terrorismo, la crisis económica y la integridad nacional. No se puede olvidar que la Guardia Civil ha perdido 36 hombres en los últimos meses de 1980».

El Ministerio de Defensa tiene muy avanzada la preparación de un anteproyecto de ley sobre las escalas de complemento de los tres Ejércitos, según una respuesta enviada por el Gobierno al diputado socialista Julio Busquet.