Una gran biblioteca de 450.000 títulos
La Biblioteca del Ministerio de Cultura, dotada de un fondo extraordinario de, 450.000 títulos, algunos de ellos auténticas. piezas únicas, formado a lo largo de más de cincuenta años a base del depósito editorial obligatorio, que ahora ya es voluntario.Araceli González Antón, bibliotecaria del cuerpo facultativo y descendiente de una antigua dinastía de bibliotecarios -su abuelo y su padre lo fueron y también su hermano lo es-, se encuentra, desde 1976, al frente de esta dependencia ministerial. Como directora de la misma ha seguido, paso a paso, el largo proceso de transformación de lo que era un inmenso cementerio bibliográfico en eficaz servicio público. En víspera de su apertura, Araceli González Antón explica los avatares de este proceso y cómo va a funcionar este nuevo e importante centro de lectura, consulta e investigación.
«Desde diciembre de 1978, hace más de dos años, trabajamos en la puesta en marcha de la biblioteca», cuenta Araceli González Antón. «El cambio de sucesivos ministros», vamos ya por el quinto, «y la inexistencia de un depósito adecuado para almacenar parte de los libros ha ido retrasando la apertura al público que ahora se va a producir, aunque la inauguración oficial, por motivos políticos, tenga que postergarse. En este período de dos años hemos tenido que trasladar cuatro veces montones de libros de una parte a otra del edificio, con las inevitables pérdidas y desperfectos que ello ocasiona. Se llegó incluso a pensar en donarlos porque no se sabía qué hacer con ellos. Siendo ya ministro Iñigo Caverol, se iniciaron por fin las obras del depósito, que, de hecho, era lo único que faltaba para empezar a funcionar».
De momento, la Biblioteca del Ministerio de Cultura se abrirá sólo por las mañanas, pues, según su directora, no hay, personal suficiente para mantener un turno doble. Se han acondicionado dos salas de lectura -una infantil y otra para adultos-, con un total de 250 plazas, «un número bastante exiguo, sobre todo en relación con los fondos existentes», comenta Araceli González Antón.
«Contamos con unos 8.000 libros, donados por el Centro Nacional de Lectura, para abastecer el servicio de préstamos. El resto ,se podrán consultar en la sala, pero no sacar de la biblioteca. Muchos de ellos están sin encuadernar y se destrozarían en dos días».
Además de los investigadores que se lancen a explorar sus ricos fondos inéditos, la Biblioteca del Ministerio deberá cubrir las necesidades de un considerable potencial de lectores normales, pues se encuentra precisamente en una de las zonas de Madrid más desabastecidas de centros de lectura. Catalogados por títulos, autores y materias y, a partir de 1979, por el sistema unificado dicionario, el casi medio millón de títulos que forma la biblioteca se ordenan, accesibles a cualquier consulta, en los paneles de ficheros que ocupan las salas de lectura. «Los libros que tenemos abarcan una temática muy variada», afirma Araceli González Antón. «De hecho, están todos los editados en España en las últimas décadas y además los extranjeros, de los que se importaron más de cincuenta ejemplares. La colección infantil y de libros de texto es muy amplia».
La hemeroteca de Prensa infantil y juvenil es una sección de la biblioteca que encierra un especial interés para estudiosos e investigadores del tema. En ella se reúnen fondos y documentación de publicaciones infantiles y juveniles de las dos últimas décadas y algunos ejemplares antiguos muy valiosos; por ejemplo, del semanario infantil ilustrado El Camarada, editado en 1887, en cuyo primer número aparece en portada la foto de un bebé que luego sería el rey Alfonso XIII.
Babelia
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