_
_
_
_

El Gobierno polaco garantiza la legalización y de la Unión Independiente de Estudiantes

La Unión Independiente de Estudiantes polacos, creada a semejanza de Solidaridad, recibió ayer garantías gubernamentales de que sería legalizada, por decisión del propio primer ministro Wojciech Jaruzelski, para tratar de contener las huelgas estudiantiles que desde el pasado fin de semana se extienden por toda Polonia.

La lucha por el control de las organizaciones estudiantiles en las universidades polacas se extiende desde Lodz, donde comenzaron las huelgas hace cuatro semanas, a los principales centros de educación superior del país.Lo que en principio significó una petición al Gobierno de que se aboliesen las clases obligatorias de ruso y marxismo-leninismo, ha dado paso a uniconfrontación directa con el Ministerio polaco de Educación sobre el control de las organizaciones estudiantiles.

Janusz Gorski, ministro de Educación polaco, aprovechó, el pasado viernes, las vacaciones estudiantiles para conversar con representantes de la Unión Socialista de los Estudiantes Polacos (SZSP) para que pusieran fin a sus huelgas. Por su parte, la Unión Independiente de Estudiantes (NZS), vinculada al sindicato libre Solidaridad, que aún no ha sido reconocida oficialmente, desencadenó desde el pasado fin de semana huelgas de ocupación de edificios universitarios en Poznan, Varsovia, Cracovia, Wroclaw y Kattowice. Igualmente se lanzó la orden de huelga en las universidades de Opole, Czestochowa y Szczecin.

Según los estudiantes, pertenecientes al NZS, se firmó un acuerdo de principio sobre la organización estudiantil independiente y tan sólo quedaba rubricarlo, así como hacer algunos arreglos de última hora a los estatutos de la Unión Independiente.

Para el ministro de Educación quedaba el punto primordial de fijar en los estatutos de los estudiantes independientes la declaración de que sus actividades se enmarcarían en la Constitución polaca, esto es, el reconocimiento del papel hegemónico del partido comunista (POUP).

El pasado domingo, los estudiantes del NZS escribieron al ministro Gorski, respondiendo que el tema de la hegemonía del POUP sería considerado como un anexo de los estatutos y el derecho de huelga estudiantil debería ser discutido entre representantes del Ministerio y los estudiantes, a esto último Gorski no ha respondido aún. En este sentido, el pasado lunes, una delegación del NZS mantuvo conversaciones en Varsovia con el director general del Ministerio de Educación, quien aludió a que no tenía instrucciones precisas sobre las reivindicaciones estudiantiles.

Entre tanto, el tono de la Prensa oficial se encrespa con los estudiantes independientes. Ayer el periódico Sztandar Mlodych, órgano de las Juventudes Socialistas, acusó al NZS de,«obstinación» y radicalizar el movimiento estudiantil al no cooperar con los estudiantes oficiales del SZSP. Ayer se encontraban en huelga unos 20.000 estudiantes en toda Polonia, que prácticamente paralizaron la actividad docente.

En relación con la posición de la confederación de sindicatos libres Solidaridad, respecto a la tregua de tres meses solicitada por Jaruzelski, el portavoz de la organización independiente, Karol Mozdelewski, afirmó que «la conclusión de los acuerdos de Gdansk era insatisfactoria», pero la propuesta del primer ministro, así como la composición de su Gobierno, «dejaba en trever una oportunidad para salir de la crisis de las últimas semanas ». Mozdelewski, portavoz de Solidaridad, expulsado del POUP junto a Jacek Kuron en 1964, afirmó que el «único papel al que aspira Solidaridad es a convertirse en interlocutor válido y respetado» por las autoridades y «este reconocimiento es el único medio de solventar la crisis ».

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_