Washington quiere impedir la ayuda internacional a la guerrilla

ENVIADO ESPECIAL, «Estados Unidos va a hacer todo lo posible para cerrar el paso hacia El Salvador a cualquier fuerza que trate de entrar en el país desde fuera», declaró ayer en la capital salvadoreña el embajador norteamericano Robert White. A continuación añadió que esto lo llevaría a cabo «por vía diplomática».

Estas declaraciones vienen a subrayar las informaciones anteriores sobre la presencia de un grupo de funcionarios estadounidense en Honduras y Guatemala con la misión de lograr de sus respectivos Gobiernos que se ejerciera un mayor control sobre la zona fronteriza con El Salvador para evitar el paso de armas o guerrilleros.

El embajador estadounidense manifestó que «El Salvador es un país crucial para el futuro de Centroamérica, y Estados Un¡dos está en la obligación de hacer todo lo posible- para, contrarrestar la amenaza de la extrema izquierda». Después de una larga pausa, añadió «Y también de la extrema derecha».

Mentís del embajador norteamericano

Sobre la presencla de supuestos voluntarios nicaragüenses que habrían entrado en El Salvador en apoyo de la guerrilla, White dijo que en ningún momento había declarado que los ocupantes de los lanchones fueran nicaragüenses y que ni siquiera podía asegurar que no fueran salvadoreños. Pero acerca de la procedencia de los barcos dijo que no se le ocurría de qué país podían venir, sino de Nicaragua.Tras mostrarse ofendido ante la posibilidad de que White huhiera modificado su posición política ante el inminente acceso al poder del presidente Ronald Reagan. se negó a especular con la ayuda que la nueva Administración republicana podría prestar al Gobierno salvadoreño.

Se limitó a decir que el equipo de Carter había -prometido un apoyo de cinco millones de dólares, ademiás de dos helicópteros de transporte, que, según todos los indicios, pueden llegar al país la próxima semana. Puso el acento en el hecho de que no eran helicópteros artillados, sino de transporte.