_
_
_
_

La oposición de París a la posible fusión entre Libia y Chad divide a los países africanos

El polémico proyecto de fusión entre Libia y Chad será tratado por los jefes de Estado de los países africanos que asisten en Togo al 14º aniversario del acceso al poder del presidente Eyadema, entre los que se encuentra el presidente del Gobierno de Unión Nacional (GUN) de Chad, Gukuwi Uedei.

En Yamena, y ante las fuertes reacciones adversas provocadas por el supuesto plan, el secretario adjunto a la presidencia de la ex colonia francesa, Adun Jacub, declaró-ayer que «no existe tal proyecto de fusión, y mucho menos de anexión, de Chad por Libia, sino que se trata simplemente de una posible alianza sobre la cual el GUN deberá pronunciarse a favor o en contra».

Adun Jacub calificó de innecesario el envío de refuerzos militares franceses a la República Centroafricana, después de que el sábado por la noche el ministro de Exteriores chadiano convocara al embajador del Elíseo para hacerle saber el descontento de su Gobierno ante la actitud asumida por París.

Francia no sólo continúa adelante con sus preparativos militares -ya ha enviado dos contingentes de hombres y material-, sino que una misión del Ministerio de Defensa se encuentra desde el domingo en Jartum para reactivar cuanto antes el acuerdo de cooperación militar franco-sudanés rubricado en 1979. Se espera también que Francia refuerce su dispositivo militar en Senegal, Niger y Gabón, donde se encuentra un total de 7.000 soldados franceses.

El domingo tuvo lugar en Trípoli una manifestación antifrancesa a cargo de miembros de la llamada fuerza africana, que amenazaron con «destruir los intereses franceses en todo el mundo si Francia persiste en sus intervenciones en el continente africano».

La manifestación fue muy moderada, y los participantes -unos cientos de personas- no atentaron contra el edificio diplomático, entre otras cosas, porque está destruido desde el 4 de febrero de 1980 por una manifestación similar.

Mientras tanto, Libia ha enviado a Argelia al comandante Abdesalam Jallud, mano derecha del presidente Gadafi, para intentar asegurarse el apoyo de Argel, ante el sombrío giro que están tomando las relaciones entre Trípoli y los demás países del continente negro. Oficialmente, Argelia no ha adoptado ninguna posición respecto a la proyectada fusión, aunque está ligada a Libia en el seno del llamado Frente de la Firmeza y a través de un tratado bilateral suscrito en 1975, por el cual «todo ataque a una de las dos revoluciones será considerado por el otro país como un ataque directo contra el mismo...».

El único país hasta ahora netamente favorable a una posible unión entre Libia y Chad ha sido Irán, que la ha calificado de «primer paso en la alianza antiimperialista en Africa». Por supuesto, esta no es la opinión de los países francófonos más cercanos a Chad.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_