20.000 personas pueden haber muerto en el terremoto de Argelia
Veinte mil muertos, decenas de miles de heridos y alrededor de 250.000 personas sin hogar es el balance todavía provisional de los dos terremotos que devastaron el viernes la ciudad argelina de El Asnam y las localidades próximas, según un portavoz de la Media Luna Roja (Cruz Roja argelina). Miles de víctimas -algunas aún con vida- se encuentran sepultadas bajo toneladas de escombros que remueven equipos especiales franceses y suizos. En la tarde del sábado ya habían sido retirados 5.000 cuerpos.
Nuevos temblores de débil intensidad fueron registrados ayer en El Asnam. El primero, a media tarde, cuando el presidente argelino, Chadli Benjedid, presidía en el lugar de la catástrofe una reunión con las autoridades locales. El último fue registrado a las ocho de la tarde (hora de Madrid). Fuentes oficiales confirmaron que el 80% de los edificios de la ciudad fueron gravemente dañados por el terremoto del viernes y el 25% resultaron completamente destruidos.Anoche llegaron a Argel dos trenes especiales transportando a 3.000 heridos, que fueron repartidos por los hospitales de la capital por trescientas ambulancias. Todos los medios humanos y materiales del país han sido movilizados hacia el lugar del desastre, cuyas carreteras de acceso están bloqueadas por convoyes interminables de camiones militares, ambulancias, grúas y cisternas. Los heridos más graves son trasladados a Argel y Orán en helicópteros.
Según los primeros testimonios, fue la duración del seísmo, cerca de un minuto, más que su violencia (7,5 puntos en la escala de Ritcher), lo que provocó mayores daños. «La violencia de la sacudida fue tal que no se podía andar. Los que tuvieron la suerte de poder escapar salieron de sus casas gateando a cuatro patas», ha explicado un médico francés que trabajaba en el hospital de El Asnam.
El 80% de la ciudad, que tiene una población próxima a los 150.000 habitantes, situada a 160 kilómetros al oeste de Argel, ha quedado destruida por el seísmo. Edificios de estructura moderna, como el hospital, el hotel Chelif, el edificio del Gobierno provincial y zonas residenciales quedaron convertidos en montones de escombros. «Todo el centro ya no existe», comentó un portavoz oficial. Durante el día de ayer se oyeron lamentos de aquellas personas sepultadas con vida bajo los escombros. Para rescatar a algunas de ellas ha sido preciso amputar brazos o piernas. Escasea el agua y no hay luz eléctrica ni comunicación telefónica con El Asnam.
En la madrugada del sábado reinaba en la ciudad un silencio de muerte, informa un enviado especial de la agencia France Presse. Todos los habitantes, huyendo de las casas destruidas o temiendo ser sorprendidos en el sueño por un nuevo terremoto, pasaron la noche en los jardines públicos o en los coches.
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El seísmo destrozó el único hospital de la ciudad
Viene de primera páginaEl centro de El Asnam ha sido particularmente afectado. Los principales edificios públicos han resultado completamente destruidos y el terremoto ha inutilizado el único hospital de la ciudad, varios de cuyos pabellones se desplomaron, pereciendo decenas de enfermos. Al menos tres barriadas fueron completamente arrasadas por el seísmo. En una de ellas, la Ciudad Nasar, vivían 3.000 personas. No lejos de esta zona, el mercado de la ciudad, rodeado de bares donde el viernes -día de descanso semanal en Argelia- se reunían cientos de personas, fue totalmente destruido por el temblor.
Unos cientos de metros más adelante, el mayor hotel de El Asnam, el Chelif, recientemente construido y frecuentado sobre todo por los extranjeros, no es más que una ruina. Varios europeos, sobre todo belgas y cooperantes de los países del Este, se encontrarían entre las víctimas.
La casi totalidad de los edificios escolares han sido asimismo destruidos o gravemente dañados. Media docena de pueblos alrededor de El Asnam han sido también afectados, sobre todo Ued Fodda, El Ataff, Kherba, Zebbudja y Sandjaz.
El ministro argelino de Sanidad, Abderrezac Buhara, declaró que se han adoptado las medidas necesarias para evitar que se produzcan epidemias.
En Argel, los setecientos médicos existentes, incluidos los que ejercen privadamente, cuyas consultas han sido cerradas, han sido requeridos por las autoridades para reforzar los equipos médicos de los centros hospitalarios. La admisión en los hospitales está reservada prácticamente a los heridos de El Asnam. Helicópteros militares han trasladado a equipos médicos de otras regiones hasta la zona siniestrada.
Ayer tarde, un grupo de médicos argelinos que residen en Francia llegaron a Argel, donde se esperaba también a veinticuatro doctores expertos en reanimación. Un movimiento de solidaridad sin precedentes se ha manifestado entre la población de la capital argelina y en las principales ciudades del país. Los centros de recogida de sangre no dan abasto en su trabajo.
El presidente argelino, Chadli Benjedid, llegó ayer a El Asnam para supervisar las tareas de rescate,que están bajo la dirección del ministro del Interior, Bualem Benhamuda. Mil quinientas tiendas de campaña han sido trasladadas a la ciudad devastada. Todas las sociedades nacionales, como la petrolera Sonatrach, han enviado sus camiones, grúas y otros vehículos a la zona. Una centralita telefónica de dieciocho líneas había sido instalada anoche, reforzada por camiones de transmisiones.
Cientos de ambulancia han llegado a El Asnam de todo el país. Uno de los principales problemas es asegurar el abastecimiento de alimentos de la población a la que hay que reagrupar.
De acuerdo con las primeras estimaciones, los seísmos registrados el viernes en el noroeste de Argelia habrán sido los peores en la moderna historia del norte de Africa.
El que en 1954 prácticamente destruyó la misma ciudad de El Asnam, todavía llamada Orleansville, provocó 1.600 muertos y unos 15.000 heridos.
En 1960, el de Agadir (Marruecos) costó unas 20.000 vidas y daños materiales también muy cuantiosos.
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