Eduardo Punset se entrevistará con Raymond Barre, el lunes, en París

El ministro de Relaciones con las Comunidades Europeas, Eduardo Punset, se entrevistará el próximo lunes en París con el primer ministro de Francia, Raymond Barre. Eduardo Punset, que ayer conversó en Madrid con el presidente de la Comisión Europea, Roy Jenkins, se desplazará a la capital francesa el próximo domingo, respondiendo a una iniciativa de¡ Gobierno galo y para realizar una visita de trabajo, en la que se incluyen contactos con Barre, con el ministro de Asuntos Exteriores, Jean François-Poncet, y con el secretario de Estado encargado de las cuestiones europeas, Bernard Raymond.

El encuentro de Punset con Barre y el diálogo que el ministro español mantuvo ayer con el presidente Jenkins se inscriben en la filosofía que el nuevo titular del ministerio encargado de las relaciones comunitarias desea imprimir a su gestión política, proyectando su estrategia negociadora en dos frentes, el comunitario, más técnico en la negociación general, y el bilateral, más político.En relación con la visita a París, que va a desarrollarse en un clima de tensión hispano-francesa no muy inferior al que imperó durante la estancia de Raymond Barre en Madrid, antes de las vacaciones de verano, se espera que Punset expondrá a las autoridades galas la política del cuarto Gobierno del presidente Suárez sobre el proceso de incorporación de España a la CEE. Una política continuista, en líneas generales, con la del anterior Gabinete, pero más dilatada en lo que a los plazos de la negociación se refiere, poniendo en enero de 1984 la fecha propicia para el ingreso de España en la Comunidad.

Aquí se incluye el deseo del nuevo ministro de forzar, desde ahora, la negociación de los 170 puntos de debate hispanocomunitario, partiendo de aquellos que no son conflictivos para ganar terreno, aunque dejando abiertas sus conclusiones para cerrarlas, más adelante, cuando pueda abordarse el núcleo de la negociación, cuyo mayor obstáculo está en el sector agrícola, que habrá de compensarse con el industrial, por ejemplo. Es por ello por lo que el nuevo ministro desea acelerar el ritmo de conversaciones, incluso durante el proceso de reestructuración de las políticas agrícola, pesquera y presupuestaria de la CEE, cuyo borradores principales deberá ultimar la Comisión Europea para finales de junio de 1981 y luego ser sancionados por el Consejo de Ministros.

Iniciativas de política interior

A esta estrategia, de negociación técnica con la Comunidad y política bilateral para asegurar de Gobierno a Gobierno la continuación del proceso de integración hispana en la Comunidad, a pesar de las reformas internas comunitarias, se le añade el deseo del ministro Punset de articular toda una serie de iniciativas políticas en el plano interno. Se buscará que el impacto de la adhesión de España a las Comunidades no produzca desequilibrios ni rupturas en los sectores económico y social españoles.

Asimismo, y en relación con el proceso de reestructuración comunitaria, el titular de Relaciones con la CEE espera que la Comisión Europea mantenga informada a España de lo esencial de sus trabajos y acepte los comentarios sugeridos porla Administración española.

Todos estos temas han sido tratados en el curso de la entre vista que Punset mantuvo ayer con Jenkins en Madrid y en la que el presidente de la Comisión Europea informó sobre la actitud «prudente» de la CEE ante las negociaciones. Actitud que prefiere ver culminado el proceso de reestructuración intracomunitaría antes de que la negociación España-CEE entre de lleno, lo que contradice el deseo español de ir avanzando en los temas posibles.

Asimismo, la parte española se interesó sobre el calendario que el Consejo de Ministros de la CEE puede dar a los temas pendientes para el cierre de la primera ronda - prenegociadora, conocida como «visión de conjunto» de los temas, y que espera opciones en los temas de pesca y agricultura. Opciones agrícolas, con vistas a la negociación, que París no desea que pasen aún por el Consejo, como lo prueba el duro documento presentado en Bruselas sobre los efectos el e la agricultura hispana en la Comunidad ampliada, papel este que ha de ser debatido en París por el ministro español.

Por último, es de esperar que Jenkins, que anoche cenó con Suárez, hablará en Madrid de otros temas menos técnicos y más políticos. El laborista británico ha llegado a la capital española en el momento en que su partido aprobó en el congreso de Blackpool una recomendación pidiendo la retirada del Reino Unido de la CEE. Ello es, sin duda, un jarro de agua fría para el presidente de la Comisión, que cesará en su puesto a finales de año en favor del luxemburgués Gaston Thorn. y que, al igual que hizo su predecesor, Ortolí, quizá decida quedarse en Bruselas como vicepresidente del organismo comunitario.