Europa no debe temer, por ahora, una penuria de petróleo
El conflicto irano-iraquí no debería originar una penuria de petróleo en el mundo, aunque llegase a extenderse a las instalaciones petroleras de ambos países en el golfo, opinan los círculos petroleros londinenses.Sólo habría un peligro real, añaden, si las exportaciones de petróleo de los demás países productores del golfo (Kuwait, Abu Dabi, Bahirain, Qatar, Omán y Arabía Saudí) quedasen interrumpidas, al bloquear Irán el estrecho de Ormuz.
La crisis, de todas formas, no se produciría en espacio de veinticuatro horas. Las reservas mundiales de petróleo (más de cien días de consumo) superan los niveles habituales. Unos cincuenta barcos petroleros gigantes han sido recientemente transformados en depósitos flotantes. Los países consumidores parecen en condiciones de poder tomar medidas, con el tiempo suficiente, en caso de interrupción parcial del abastecimiento.
Una disminución de las exportaciones energéticas iraquíes o iraníes podría ser parcialmente compensada por un incremento de la producción en otras zonas, empezando por la propia Arabía Saudí. Una interrupción prolongada de todas las exportaciones del golfo parece muy improbable a los expertos. Estos ponen de relieve que tanto Irak como Irán han evitado cuidadosamente, hasta el momento, atacar mutuamente sus instalaciones petroleras. Bagdad y Teherán son conscientes de los enormes daños que causaría a sus economías cualquier ataque de gran envergadura contra las mencionadas instalaciones. Los pequeños destrozos causados hasta el momento en las instalaciones petroleras son debidos, opinan los expertos, a errores de disparo. Aunque no se puede descartar una guerra total entre ambos países, guerra que afectaría a sus instalaciones petroleras del golfo, Irán, señalan los expertos londinenses, sólo exporta ahora 700.000 barriles diarios (5,3 millones menos que antes de la revolución), que salen del país a través de la terminal de la isla de Jarq, situada a unos doscientos kilómetros de la frontera con Irak.
Por su parte, Irak ha incrementado su producción, llegando a exportar oficialmente 3,5 millones de barriles. Pero sólo un tercio es exportado a través del golfo. El resto del petróleo es extraído en el norte del país y es exportado, vía Turquía o Siria, hasta el Mediterráneo.
El precio del oro pasó la barrera de los setecientos dólares por onza en lingote, al producirse una febril actividad compradora.
Los choques armados entre Irán e Irak produjeron un gran nerviosismo en el mercado, traducido en incesantes órdenes de compra, las cuales arreciaron al llegar al mercado londinense noticias de que aviones iraquíes habían bombardeado el aeropuerto de Teherán.
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