La familia de España Vivas niega la militancia de éste en los GRAPO

La presunta militancia de José España Vivas en los Grupos Revolucionanos Antifascistas Primero de Octubre (GRAPO), según señalaban las informaciones emitidas por el Ministerio del Interior, ha sido negada por la familia de éste, así como por la junta de vecinos del barrio de Venecia, de la localidad de Alcalá de Henares, durante el curso de una conferencia de Prensa celebrada ayer tarde en los locales de la citada asociación.El comunicado que emitió la citada junta de vecinos señalaba que «España Vivas no formaba parte de ningún grupo político, y únicamente pertenecía a la junta directiva de esa asociación, con la que llevaba trabajando cerca de dos años». José España, de veinticinco años, natural de Alcalá de Henares, trabajaba especialmente en la comisión de urbanismo de la asociación Y, según comunicó a este periódico su mujer, María José Serrano, «estaba completamente en contra de la lucha armada y, por supuesto, no tenía ninguna relación con el asesinato del general Briz Armengol, puesto que llevaba mas de tres años sin viajar a Barcelona».

España Vivas era militante activo del Movimiento Ciudadano y Ecologista de Alcalá, y la familia, según expresó su mujer, «rechaza la tesis de muerte natural, según la versión oficial». También comunicó que «las autoridades competentes se negaron a practicar una segunda autopsia al fallecido y nos fue negada la vista al cadáver. Además, nos quisieron entregar sus ropas, que estaban completamente destrozadas, por lo que no quisimos hacernos cargo de ellas». Por otro lado, el padre y varios hermanos de España Vivas expresaron su condena por el silencio mantenido por parte de las autoridades ante los hechos ocurridos.

Querella por presuntas torturas

El fallecimiento de España Vivas cuando era trasladado de las dependencias policiales al Hospital Provincial, tras haber sufrido un desvanecimiento cuando era interrogado por la Brigada Central de Información, en la Dirección de la Seguridad del Estado, ha motivado que la familia haya solicitado los trámites de interposición de querella criminal por «poder constituir presunto delito de tortura», según. prevé el artículo 204 del Código Penal, con resultado específico de homicidio, así como otra querella contra los funcionarios de la Brigada Central de Información que prestaban servicio ese día».En los trámites de interposición de la querella criminal ha sido pedida la comparecencia de los funcionarios de esa brigada, así como el parte médico de defunción que instruyó un colegiado de la Dirección de la Seguridad del Estado. También ha sido requerido el resultado de la primera autopsia para que pueda llegar al Juzgado de Instrucción número 7, que lleva el caso, y la exhumación del cadáver para practicarle una segunda autopsia.

Por último, han pedido que se remitan los antecedentes policiales y penales del fallecido, si los hubiere, y una certificación por parte del jefe superior de Policía de Alcalá en la que se muestre si España Vivas aparecía en alguna lista de busca y captura.