Las enmiendas a la ley de Divorcio
Cumplido a finales de abril el plazo para la presentación de enmiendas, comienza ahora su andadura propiamente parlamentaria el proyecto de ley modificativo de la normativa civil sobre el tema matrimonial, con la inclusión de la magna cuestión del divorcio. Y como es asunto, sobre todo éste último, en que siempre hay muchas cosas que decir y prácticamente nadie querrá permanecer callado, la primera observación elemental que se nos ofrece es que no vaya a quedar «la casa por barrer». Porque es claro que a estas alturas ni el sistema matrimonial vigente resulta ya adecuado, ni los recientes cambios constitucionales y concordatorios son un modelo precisamente de concreción jurídica, ni se ha conseguido superar la ambigüedad en puntos claves, ni se puede decir que hayamos avanzado hasta aho ra en la solución convencional y pacífica de los conflictos matrimoniales. A la vista de todo eso no hay duda de que el primer problema que habrá de afrontar la Comisión de Justicia del Congreso será el de superar las numerosas enmiendas a la totalidad presentadas.Y como unos planteamientos tan dispares no pueden coincidir en unos mismos resultados -lo que ocurriría indefectiblemente si los enmendantes a la totalidad sólo se atienen a la negativa y al rechazo-, es lógico y presumible que la Comisión de Justicia haya de distinguir entre enmiendas a la totalidad que piden la devolución del texto al Gobierno, y enmiendas que propugnan un texto alternativo.
De ahí también que, al dividir y matizar la votación de totalidad, los grupos parlamentarios que presentan un texto alternativo -PSOE y PCE- podrán defender sus respectivas posturas sin provocar una devolución del proyecto al Gobierno, que a estas alturas no creemos beneficie en nada a los objetantes de izquierda. Y una vez aceptado el proyecto a los solos efectos de su estudio por la comisión, unos y otros -también los que no han enmendado a la totalidad- podrán intervenir en la información de un texto que tiene no poco que corregir y mucho qu completar.
11 de junio
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