Argelia desmembra en tres empresas la compañía nacional de petróleos Sonatrach

El Gobierno argelino anunció ayer el desmembramiento oficial de la empresa estatal del petróleo Sonatrach, parte de cuyas actividades -relacionadas con el refinado del crudo, la dirección de grandes trabajos petroleros y la fabricación de plásticos- constituirán la atribución de tres empresas nuevas, sin ninguna vinculación con la anterior. El objetivo es «hacer más eficaz la gestión empresarial» y dar una mayor flexibilidad a este sector vital de la economía argelina.

El diario oficial de la República argelina publica una serie de decretos firmados por el presidente Chadli Bendjedid, por los cuales Sonatrach se ve despojada de sus atribuciones en lo que concierne a tres capítulos de su actividad, relacionadas a la investigación, producción, transporte, transformación y comercialización de hidrocarburos. Las nuevas empresas creadas por el Gobierno son las de refinado y distribución, la de plásticos y cauchos y la de grandes trabajos petroleros. Sus respectivas sedes serán instaladas en Buduau, Setif y Regaia.

Transferencias de medios

A todas ellas les serán transferidas las estructuras, medios, bienes, actividad y personal con que contaba hasta ahora Sonatrach, en lo que concierne a las ramas citadas. Las empresas serán autorizadas a contratar empréstitos en el exterior, en la misma forma en que lo venía haciendo la sociedad madre.Sonatrach, que contaba hasta ahora con 85.000 empleados, ha sido considerada como un verdadero «poder dentro del poder» y feudo de una clase tecnócrata occidentalizada que, en aras a la efectividad de su gestión, se oponía a la implantación de la llamada «gestión socialista empresarial», que es uno de los pilares más fuertes de la estructura social del régimen argelino. Sin embargo, una parte de su personal de rango elevado admitía que la sociedad «se había convertido en un monstruo tentacular difícil de ser dirigido».

La constitución de las tres empresas citadas no representa otra cosa, a juicio de los analistas, que la primera etapa de un proceso más amplio destinado a dividir Sonatrach en pequeñas unidades empresariales. La separación de su organigrama del personal y medios relativos al refinado, la fabricación de plásticos y cauchos y la dirección de grandes trabajos petroleros no supone más que una reducción limitada, por el momento, de las atribuciones de Sonatrach, que se mantiene como la empresa más importante de Argelia, vinculada a la obtención de más del 90% de las entradas en moneda convertible.

Una empresa modelo del régimen

Sonatrach fue creada en diciembre de 1963 bajo el régimen de Ahmed Ben Bella. Una de sus primeras actividades fue responsabilizarse con el 25% de la participación financiera en el oleoducto Haud-el-Hamra al puerto de Bejaia. En 1967, la empresa argelina adquirió las partes del capital norteamericano en el refinado del crudo argelino, pero el gran paso sólo fue dado en febrero de 1971, bajo el régimen de Huari Bumedian, cuando fueron nacionalizadas las compañías extranjeras, en su gran mayoría de origen francés.La firma opera directamente en los cuarenta campos petrolíferos actualmente en explotación, participando mayoritariamente, en régimen de Joint Venture, en los de El-Djorf y Kef-el-Argub, con la firma Hispanoil; en los de Ben-Khala, Nezla, Gassi-Tuil, Stah y Mereksen, con la francesa Total, y en el de Mesdar, con la Getty.