Schmidt consulta con Washington y París una invitación de Breznev para que viaje a Moscú

El jefe del Estado soviético, Leónidas Breznev, ha reactualizado una invitación al canciller Helmut Schmidt para que visite Moscú en los próximos meses, incluso antes del verano. El portavoz oficial del Gobierno añadió, al comentar esta noticia a los periodistas acreditados en Bonn, que el embajador soviético en la RFA, Semionov, había preguntado al canciller si acepta esta invitación, que ya fue extendida en mayo de 1978, pero que, hasta ahora, había sido pospuesta en varias ocasiones.

Sin embargo, el canciller Schmidt afirmó ayer, en el transcurso de una rueda de prensa, que, dada la actual situación internacional, su Gobierno creía oportuno que los atletas de la RFA no acudiesen a los Juegos Olímpicos de Moscú.La decisión corresponde, en última instancia, al Comité Olímpico alemán, con cuyo presidente se reunió Schmidt, antes de su declaración.

El Gabinete de Bonn. solicitará, el próximo miércoles, al Comité Olímpico nacional que apoye la política del boicoteo. Entre tanto, los atletas favorables a los Juegos declararon su intención de manifestarse el lunes en Dortmund.

El canciller Schrnidt ha vinculado este viaje, pendiente aún de fijar fechas, a la actual situación internacional, y por ello comunicó ayer telefónicamente con los presidentes de Estados Unidos, Carter, y de Francia, Giscard d'Estaing.

El portavoz no -manifestó qué reacción expresaron ambos políticos ante la información del canciller alemán. El anuncio de esta visita se ha relacionado en Bonn con la sugerencia de Schmidt en favor de una congelación del establecimiento de nuevos cohetes de mediano alcance, sugerencia dirigida a Estados Unidos y Unión Soviética, aunque, con posterioridad, se ha puntualizado que el destinatario era realmente Moscú. En este sentido, el portavoz gubernamental señaló que la proposición de Schmidt es compartida por todo el Gobierno, incluso en la parte que puede tocar a Estados Unidos, pero que al tiempo mantiene su apoyo a la decisión adoptada por la OTAN el pasado 12 de diciembre, en favor del rearme a base de estos cohetes de medio alcance.

Según el diario Die Welt, que anticipaba ayer la posibilidad de que Schmidt vaya a Moscú a comienzos de verano, la Unión Soviética « , desea mantener al mínimo el riesgo de una nueva guerra mundial» y está dispuesta a acudir a la Conferencia de Seguridad en su fase de Madrid. Sobre Afganistán señala Die Welt, citando fuentes del Pacto de Varsovia, que Moscú «está interesado en una solución política de la crisis».

La proposición de Schmidt ha sido matizada por el ministro de Asuntos Exteriores federal, Genscher, ante la fracción parlamentaria liberal, insistiendo en que la decisión de la OTAN sobre los misiles nucleares permanece en su anterior virtualidad.

En cuanto al tema de la aplicación de sanciones económicas contra Irán, tema que ha ocupado también al Gobierno federal ayer, en su primera reunión tras las vacaciones de pascua, el portavoz oficial dijo a los periodistas que Bonn decidirá la próxima semana de acuerdo con los demás países comunitarios.