Primer ensayo para un ejercito interracial

Quizá el acontecimiento de signo positivo más importante de los últimos tiempos en Rodesia lo ha constituido el experimento iniciado el lunes con el intento de integración de un batallón de guerrilleros del ZIPRA, de Joshua Nkomo en el Ejército rodesiano, con vistas a la formación del futuro Ejército de Zimbabwe.Unos 650 guerrilleros abandonaron el punto de asamblea Lima y se dirigieron a los acuartelamientos de la primera brigada de las fuerzas rodesianas para recibir el oportuno adiestramiento. La lleizada de los guerrilleros fue presenciada por el jefe de las fuerzas de la Commonwealth, general John Accland; el jefe de Estado Mayor del Ejército rodesiano, general Derry MacIntyre, y el comandante de las fuerzas del ZIPRA, Dumiso Dabengwa. Una invitación similar ha sido aceptada por las fuerzas de Robert Mugabe.

Si el experimento sale bien, uno de los problemas más espinosos para la pacífica convivencia en Zimbabwe habrá quedado resuelto, aunque es evidente que todavía queda mucho camino por recorrer.

Los dirigentes nacionalistas han manifestado que en el futuro Ejército de Zimbabwe sólo tendrán cabida los naturales del país, en una referencia obvia a los mercenarios de otras nacionalidades, principalmente surafricanos, y han exigido la disolución de los cuerpos especiales como los Selous Scouts.

El tema de la retirada de la fuerza observadora de la Commonwealth, compuesta por 1.200 hombres de cinco paísés, no ha sido todavía decidido, pero parece desprenderse que dicho contingente permanecerá en Rodesia, por lo menos, hasta la proclamación oficial de la independencia.