Las buenas relaciones germano-soviéticas

«( ... ) En las semanas que sucedieron a la invasión soviética de Afganistán, la crema de la nobleza de la economía alemana se apresuró a llamar a las puertas de Moscú. Casi todos querían participar del honor de ser recibidos por el vicepresidente del consejo soviético, Tichonow ( ... ).La economía alemana se enfrenta a graves decisiones. En Bonn se exalta la solidaridad con América de labios para afuera, en contradicción con la necesidad de mantener el comercio con Moscú, también por motivos políticos y ala vez garantizar los puestos de trabajo. Las enormes proporciones del comercio con la Unión Soviética han despertado el apetito de la economía alemana ( ... ).

Así pues, los intereses particulares son más fuertes que los intereses políticos definidos dentro de la alianza occidental. Existe una diferencla entre los políticos alemanes y los administradores de empresas alemanas. Por esta razón, tratan de ocultar sus esfuerzos y sus actividades opuestas. Si la Unión Soviética consigue colocar a su lado la economía alemana, el boicot de los Juegos Olímpicos no le afectará sensiblemente. Habrá logrado un gran éxito. ( ... )»

, 12 de febrero