Próxima construcción de una "central solar" en Almería
El próximo día 17 de enero de 1980, a mediodía, se iniciará la construcción de dos plantas de energía solar de quinientos kilovatios, cerca de la ciudad española de Almería. Al acto asistirán altos funcionarios del Ministerio español de Energía, así como el doctor Ulf Lantzke, director ejecutivo de la Agencia Internacional de Energía (AIE), entidad que patrocina el proyecto.«La perspectiva de generar electricidad gracias a la energía solar», aseguran los promotores del proyecto, «ha suscitado considerable interés en el marco de la búsqueda de nuevas fuentes eneigéticas. A pesar de haberse comprobado su viabilidad en la navegación espacial, así como en tierra,para suministrar pequenas cantidades de electricidad, el desarrollo de sistemas solares de energía eléctrica para satisfacer necesidades más terrenales se encuentra aún en una etapa inicial. »
Participan en el mencionado proyecto nueve países miembros de la AlE. Aquel incluye la construcción y funcionamiento de dos plantas de quinientos kilovatios de distinta concepción técnica. Las dos se encuentran en el mismo emplazamiento, para facilitar la comparación de los dos métodos utilizados. En el mismo lugar va a ser desarrollado un proyecto nacional español de energía solar, CESA-1.
Las dos plantas, cuya construcción promueve la Agencia Internacional de Energía responderán: una de ellas, al sistema del colector distribuido, y la otra, al sistema del receptor central. El primer sistema, el de colector distribuido, ,emplea espejos parabólicos de concentración, que hacen converger los rayos solÚes en cañerías por las.que circula un líquido: el fluído de trabajo. Este se calienta y se utiliza para accionar una turbina de vapor que genera electricidad, según el método normal. Los espejos, de corta distancia focal, están colocados en veinticuatro hileras, en una superficie de unas seis hectáreas.
El otro sistema, el de receptor central, denominado a veces torre energética, es descrito como integrado por «una caldera colocada sobre una torre central; en la zona circundante se colocará una serie de, aproximadamente, cien espejos planos, sobre unas seis hectáreas. Estos grandes espejos, o heliostatos, reflejarán los rayos solares a una distancia de hasta doscientos metros, hasta el receptor central, calentando un fluido de trabajo diferente, el cual, a su vez, produce vapor y acciona un alternador impulsado por máquina que genera electricidad. Contrariamente al sistema del colector distribuido, se considera que una central de receptor central de quinientos kilovatios representa la dimensión más pequeña a la que puede aplicarse esta concepción en el estado actual de la tecnología».
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.