El "gran embargo contra Irán comienza a discutirse en el Consejo de Seguridad

El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas comenzará hoy a discutir, mediante consultas informales, la petición norteamericana de sanciones económicas contra Irán. El alcance exacto de estas sanciones no se conoce por el momento, pero, aparentemente, Estados Unidos ha pedido un embargo comercial muy amplio, que sólo excluye alimentos y medicinas.

El embajador norteamericano ante la ONU, Donald McHenry, solicitó formalmente el lunes pasado la reunión urgente del Consejo de Seguridad. En una carta dirigida al embajador chino, Chen Chu, presidente del Consejo durante el mes de diciembre, McHenry dice que Irán ha ignorado sus obligaciones internacionales y que la ONU debe buscar medidas que le obliguen a atenderlas.Las consultas informales entre los quince países miembros del alto organismo de las Naciones Unidas durarán unos dos días, después de los cuales se celebrará una reunión a puerta cerrada y, por último, una sesión pública, en la que se votará sobre la petición norteamericana. Son necesarios nueve votos afirmativos para imponer las sanciones económicas a Irán y que ninguno de los miembros permanentes del Consejo ejerza su derecho al veto.

Estados Unidos ha advertido a la Unión Soviética que un veto de las sanciones contra Irán se consideraría un acto hostil y podría repercutir en las relaciones entre las dos superpontencias, además de impedir la ratificación del tratado SALT II por el Senado norteamericano. Los soviéticos no han dado seguridades, reconoció el portavoz del Departaniento de Estado, pero en la Adrninistración Carter se daba como seguro que Moscú optará por la abstención, al igual, probablemente, que la República Popular China.

Para conseguir los nueve votos necesarios, los diplomáticos norteamericanos llevan ya semanas trabajando en los pasillos de la ONU. Contra lo que se esperaba, Estados Unidos piensa solicitar un embargo comercial muy amplio contra Irán y está elaborando una lista de productos. En caso de que el Consejo rechazara la imposición de sanciones, Washington podría bloquear el estrecho de Ormuz, impidiendo el tráfico naval de y hacia Irán. Esta posibilidad se está recordando a los miembros del Consejo poco favorables al embargo económico, que se les presenta así como un mal menor.

Emoción en Washington

En cualquier caso, y aunque Estados Unidos consiga la Imposición de duras sanciones económicas contra Irán, ello no resolverá la crisis de los rehenes que entra hoy en el día 53 de su cautividad. El embargo comercial tendrá escasos efectos, pero además éstos no se dejarán notar hasta dentro de varios meses ni supondrán una presión tan grande sobre los revolucionarios iraníes como para que éstos se vean obligados a poner en libertad a los rehenes.

Millares de cartas siguen llegando a la embajada iraní en Washington y a la misión ante las Naciones UnIdas; unas pidiendo la libertad de los cautivos y otras enviando a éstos felicitaciones navideñas y palabras de aliento. Frente a la Casa Blanca, el tradicional abeto navideño sigue apagado, con cincuenta árboles pequeños (originariamente, uno por cada estado de la Unión; luego, uno por cada rehén) encendidos a su alrededor.

El presidente norteamericano, en un mensaje navideño, presentó ayer el «valor y la nobleza de espíritu de los rehenes presos en la embajada de Teherán» como un ejemplo para el resto del país.

El titular de la Casa Blanca envió telegramas a la totalidad de las familias de los norteamericanos retenidos en Teherán, en los que decía: «Este es un tiempo difícil para vosotros, quizá el más difícil de vuestra vida. Pero habéis de saber que todo el pueblo de Estados Unidos está orgulloso del valor y la nobleza de espíritu que estáis demostrando.»