Transportes El Carbonero se convertirá en empresa pública con participación de Renfe

El Carbonero, SA -compañía de transporte de viajeros-, cuyos trabajadores mantienen una nueva huelga indefinida, se convertirá en una empresa pública, cuyo capital se repartirán Renfe y, en menor cuantía, el Consejo Regional de Asturias, según informó el subsecretario de Transportes, Alejandro Rebollo, al consejero regional de Obras Públicas, Víctor Zapico.

Esta fórmula, similar a la utilizada en Canarias para resolver el caso de TICSA, puede chocar con la actual empresa, que anteriormente impugnó por vía de recurso la resolución que decretó la intervención del servicio, y que acaba de presentar una propuesta relativa a mantener la explotación por la concesionaria actual. Tal propuesta trata de corregir el sobredimensionamiento de la plantilla, no reduciéndola, y potenciar toda su capacidad productiva, sin perjuicio de la reducción normal que pueda producirse por jubilaciones u otras causas; promocionar la actividad discrecional para absorber el exceso de recursos, potenciando la capacidad de empleo de los recursos humanos; renegociar las condiciones laborales y de trabajo, para desarrollar las posibilidades de producción y rentabilidad; establecer la forma de liquidación de la deuda salarial y gestionar ante la Administración todas las ayudas o mejoras posibles.Un estudio técnico elaborado por una empresa especializada presentaba como alternativas para el futuro inmediato las opciones privada y pública. Inclinándose por la segunda, el órgano colegiado de intervención se manifestó, por el contrario, favorable a la opción privada, motivo por el que los trabajadores volvieron a la huelga indefinida el pasado día 7. A favor de la empresa pública se pronunciaron los dos representantes de los trabajadores en el órgano de intervención; por una solución mixta, el representante del Consejo Regional, y a favor de la solución privada en la actual situación concesionaria, el presidente del órgano colegiado, el representante de la Delegación de Hacienda, los dos representantes de la empresa y el secretario. El inspector de Trabajo se abstuvo.

La fórmula adoptada por el Ministerio de Transportes garantiza el futuro de El Carbonero y asegura los puestos de trabajo de su plantilla. El consejero regional Víctor Zapico mantuvo ya la primera reunión con el director de Renfe para iniciar los contactos de cara a materializar el proyecto. La crisis de El Carbonero, compañía de transportes de viajeros que comunica la cuenca minera del Nalón con Oviedo, provocó en los meses de mayo y junio pasados una huelga de 49 días de duración, que finalizó con la intervención de la concesión de este servicio público, medida considerada entonces por los trabajadores como una solución puente hasta la creación de una mancomunidad municipalizada o regionalizada.

Los trabajadores se oponen rotundamente al mantenimiento de la empresa privada, alegando su incapacidad técnico-económica, la amenaza de la reducción de la plantilla, la pérdida de los derechos laborales adquiridos y de los 35 millones de pesetas que les adeuda la sociedad.