La Diputación, decidida a subvencionar los toros en Madrid

Después de la atonía, la indiferencia y hasta el abandono que la Administración ha tenido durante, cuarenta años para la fiesta de toros, he aquí la noticia que puede conmover a todos los estamentos del mundo taurino: la Diputación de Madrid está decidida a participar activamente en la gestión del espectáculo a nivel provincial, a difundirlo y a subvencionarlo. Llegaría incluso a hacer aportaciones económicas para que se celebren las novilladas de los jueves en Las Ventas.

Hay, naturalmente, un gran trabajo por hacer, pues prácticamente se parte de la nada, pero Luis Larroque, vicepresidente de la Corporación, diputado del PCE y visitador de la plaza, tiene el empeño de modificar radicalmente la posición que años atrás han tenido los diputados con respecto a Las Ventas, y que prácticamente se limitaba a garantizar el cobro del canon de arrendamiento y organizar la corrida de beneficencia. «Hemos constituido un grupo de trabajo», dice, «que antes de un mes ha de tener estudiada la creación de una organización interna para gestionar las relaciones con el arrendatario de Las Ventas, y además las líneas maestras de la política taurina que debe desarrollar la Diputación. Integramos este grupo, junto a los letrados señores Beato, Maldonado y Comendador, los diputados González Velayos, de UCD, y yo.»Seguramente se llegará -esta es la idea central de Larroque- a crear un órgano especial de gestión, al estilo del que rige la Ciudad Sanitaria Francisco Franco, por ejemplo, al objeto de que la política taurina de la Diputación tenga amplias competencias, recursos y autonomía, y haya una participación pública en el espectáculo.

Pregunta. ¿Este órgano sería en sustitución del arrendatario o simultáneo al mismo?

Respuesta. A nosotros no nos importaría provincializar el espectáculo taurino y llegar a la gestión directa en la plaza de Las Ventas. Incluso sería deseable. No hemos de olvidar, sin embargo, que hay un arrendatario, Diodoro Canorea, con el que hemos firmado un contrato que está vigente. Otra cuestión es la tituación actual y concreta de nuestra relación contractual, que no está muy clara. (Por cierto, que aún no ha abonado, como debió hacer antes del pasado 31, el 50% del canon.) Tenemos, por ejemplo, la presencia de Taurina Hispalense, que, al parecer, respalda económicamente a Canorea, y una petición de transferencia de titularidad del contrato, que aún no se ha hecho. Pero hay más: el pago del canon anual para el año próximo y siguientes no está garantizado por aval, pues no lo previó el contrato. En consecuencia, la Diputación está en el aire, en este aspecto, y obviamente debemos actuar con cautela. Creemos que Canorea es un empresario experimentado, con capacidad profesional suficiente para dirigir las temporadas de Las Ventas, mientras su capacidad económica hemos oído que es discutible sin la Taurina Hispalense, en tanto que a los componentes de esta sociedad no los conozco. Es decir, que en cualquier caso, el tema se presenta complicado y desde luego nunca haríamos la transferencia de titularidad del arrendamiento sin unas negociaciones serias que garanticen varios aspectos básicos; entre otros, que el pago del canon esté respaldado por aval bancario.

P. ¿No podría entrar también, en estas negociaciones, la condición de que las temporadas taurinas tengan mayor plenitud, en cuanto a características y número de festejos?

R. Por supuesto que esta podría ser otra de las condiciones importantes, y aun creo que se refiere usted a las novilladas de los jueves, pues las piden los aficionados, tanto por contemplar mayor número de festejos como para que se produzca la promoción de novilleros y renovación del escalafón de matadores. No sabría decirle ahora cómo solucionaríamos el tema, llegado el momento. En el caso de la gestión directa, eso estaría hecho; hay también la posibilidad de una fórmula combinada, de acuerdo arrendatario y Diputación.

P. La empresa argumenta que las novilladas no son rentables generalmente y que en Madrid se ha perdido la tradición de los jueves taurinos. Estamos, pues, en un círculo vicioso, pues si no hay ambiente no se organizan novilladas y no se organizan éstas porque no hay ambiente. ¿Podría llegar la Diputación a subvencionar las novilladas de los jueves?

R. Podríamos hacerlo. Se lo digo formalmente. No nos importa emplear dinero si nos ha de producir una rentabilidad cultural, y la fiesta de toros es inequívocamente un fenómeno cultural, enraizado con la propia historia de nuestro pueblo. Si gastando dinero conseguimos promocionar la fiesta, habremos alcanzado un objetivo en esta parcela. Pero además está la rentabilidad económica, pues la plaza de Las Ventas, que a lo mejor es ahora un negocio redondo -como usted dice en sus artículos-, puede dejar de serlo si se produce la pérdida de afición. Tanto en el supuesto de que en un futuro vayamos a la gestión directa, como en el de que vayamos a nueva subasta, es fundamental que la plaza tenga categoría, clientela, rentabilidad clara, y debemos procurarlo desde ahora mismo. Esta es la razón, por ejemplo, de que dediquemos un millón de pesetas para ayuda de la investigación genética que promueve la Unión de Criadores de Toros de Lidia y otra cantidad similar a un ciclo de conferencias; de que estudiemos la formación de un frente conjunto de todos los ayuntamientos de la provincia para relanzar el espectáculo taurino; de que proyectemos una campaña de difusión de la fiesta, en lo que, por cierto, no tendríamos ningún inconveniente en cambiar impresiones con el director general de Teatro y Espectáculos para ese plan de divulgación del que hablaba ayer en EL PAIS.

P. Los supuestos incumplimientos de contrato por parte de Canorea, ¿han sido estudiados por la Diputación?

R. En estos momentos se estudian por la asesoría jurídica los cuatro puntos básicos -programar rejoneadores en días festivos, no contratar figuras de categoría especial en otoño, no celebrar las novilladas de promoción, subida de precios- y en breve tendré el correspondiente dictamen. Por supuesto que actuaremos a la vista del mismo.

P. ¿Habrá mejoras en la plaza para el próximo año?

R. Hemos dedicado 75 millones de pesetas a reforzar los tendidos, renovar totalmente el ruedo, que tendrá nuevo drenaje; remozar barreras y burladeros, arreglo de corrales, cambio de los bares interiores, etcétera. Son, sin duda, las obras más importantes que se han hecho desde que se construyó la plaza. Y en la temporada próxima editaremos el programa oficial.