Pesimismo generalizado entre el empresariado vasco
El «grave deterioro de la economía vizcaína», con «muchas empresas que están llegando al límite de sus posibilidades financieras», está creando «un clima psicológico de pesimismo que puede conducirnos a derroteros muy peligrosos», según un comunicado emitido ayer por la Cámara de Comercio de Bilbao.
Para contrarrestar ese clima, la Cámara se dirige a los empresarios, entidades financieras, centrales sindicales y patronales, a quienes exhorta a «evitar la tentación del abandonismo» y a «intentar una conciliación de intereses, en bien del conjunto de la comunidad».
A la Administración se le solicitan «acciones sectoriales decididas y enérgicas y planes de reestructuración, largo tiempo demorados, en sectores clave que están en franca crisis, como son el siderúrgico, la construcción naval, la marina mercante, la máquina-herramienta, los bienes de equipo y la construcción, que tanto peso específico tienen en la economía vasca».
El documento finaliza dirigiéndose a la «opinión pública en general», de quien solicita «sepa aceptar solidariamente la dosis de trabajo, austeridad, colaboración, sacrificio y esfuerzo que a todos y cada uno de nosotros nos corresponde».
