El Tordera, un río envenenado entre Gerona y Barcelona

El río Tordera tiene los días contados. Los técnicos le dan pocos años de vida potable y muestran total escepticismo ante la posibilidad de que puedan arbitrarse medidas que pongan freno a la contaminación desmedida de que es objeto. Las mismas empresas -en el informe se dan nombres y apellidos- vienen contaminándolo desde hace años, a pesar de las rituales multas que más bien parecen legitimar una situación que ayudar a remediarla. Dentro de sus limitaciones y pequeño caudal, el Tordera surte de agua potable a importantes localidades de la Costa Brava, cuya población constante supera los 100.000 habitantes. En el verano, por supuesto, se dispara. Sobre este tema informa nuestro corresponsal en Gerona, .

Los alcaldes de nueve poblaciones que utilizan aguas del río Tordera para su abastecimiento han publicado un inzforme, elaborado conjuntamente con la comisión interministerial de la provincia de Barcelona y Gerona sobre el alto grado de contaminación que sufre dicho cauce fluvial. El informe manifiesta que, « a partir de 1976, la calidad obtenida de los pozos ha disminuido de forma alarmante, obteniéndose además altas cotas de colibacilos y materia orgánica, lo que obliga a clorarar el agua del suministro de forma intensiva, lo que, a su vez, provoca una cloración y un olor alarmante para los usuarios». La pésima calidad del agua potable que salía de los grifos de la población gerundense de Blanes obligó al Ayuntamiento a dar una explicación pública sobre el problema.El río Tordera nace en la falda del Montseny, recorre unos 65 kilómetros hasta desembocar en el mar, entre Malgrat y Blanes, y su cuenca tiene una superficie de 840 kilómetros cuadradas. El total de sus recursos acuíferos es de 126 hectómetros cúbicos al año. En estos momentos la demanda total es de cuarenta hectómetros cúbicos al año, previéndose que serán sesenta hectómetros cúbicos en 1985.

El cauce del río sirve de frontera entre las provincias de Gerona y Barcelona durante los últimos kilómetros. Al hablar de su contaminación conviene recordar que gran parte de la misma proviene de sus afluentes.

Agua insana para veraneantes

El número de usuarios del agua del Tordera se eleva a unas 100.000 personas en época normal, cifra que en los meses de verano es prácticamente el doble por la presencia de turistas, ya que se trata de poblaciones situadas, en su mayoría, a lo largo de la Costa Brava y el Maresme. Estas poblaciones son Tossa de Mar, Lloret, Blanes, Malgrat, Pineda, Calella, Canet, San Pol y Arenys de Mar, además, la villa de Tordera. Las causas de esta degradación aparecen perfectamente descritos en el mencionado informe: «En primer lugar, son los vertidos, sin ninguna clase de depuración, de los alcantarillados de la cuenca; en segundo lugar, los vertidos de las empresas que, o bien no tienen depuradora, las que tienen no funciona.A estas causas hay que añadir también la existencia de varias granjas procinas y urbanizacione que no poseen sistemas adecuados de depuración de sus vertidos.

Todo ello ha ocasionado la creciente degradación del acuífero del Tordera en los once años últimos. Según un estudio efectuado por el Banco Urquijo, que confirma el informe de los nueve ayuntamientos citados.

Los responsables

En este informe aparecen, además, los nombres concretos de las principales industrias contaminantes. Entre ellas, se citan las siguientes, que contaminan por residuos de óxido de manganeso, fenoles y diversas resinas y colorantes: Baricine, de Sen Celoni; Bagan, de La Batlloria; Bota, de Riudearenes; Martorell, de Santa Coloma de Fames; Derivados Fores-tales, de San Celoni; Derivados Fenólicos, de Ibiden; Amias, de San Celoni; Ripe, de Riudeareties; Fibracolor, de Tordera; Tintes Orient, de Hostalrich, y Medeca, de Fogas de Tordera, entre otras.Algunas de estas empresas han sido reiteradamente multadas por la Comisaría de Aguas del Pirineo Oriental con sanciones de hasta 20.000 pesetas cada mes, pero como afirmaba el subdirector general del Medio Ambiente, Alfonso Ensenat, «las multas por vertidos no resuelven nada puesto que parecen consagrar el derecho a contaminar». Tal es el caso de Tintes Orient, de Arbucies; Mosaicos Planas, de Santa Coloma de Farnés; Matadero Rus-Pert, de Massanet de La Selva; Rite, de Riudearenes; Tintes Valls, de Hostalrich, y otros.

El informe de los ayuntamientos afirma que muchas empresas situadas en la cuenca del Tordera no cuentan con depuradora adecuada y algunas que ya la tienen instalada no la hacen funcionar en la práctica con eficiencia. Concretamente denuncia la empresa Fibracolor, de acabados de tejidos, situada en el centro municipal de Tordera, que vierte 16.000 metros cúbicos diarios de aguas residuales al río. También denuncia a la empresa Pybor, que por defecto de las bombas de elevación de aguas residuales las vierte igualmente al cauce fluvial, o el caso de la depuradora colectiva de las empresas Tintes Orient, Estampados Orient, Tintes Valls, Estampados Tordera, que hasta el pasado mes de mayo no ha entrado en funcionamiento, o el de las empresas Medeca y Productos Químicos, de Fogas de Tordera, que poseen una gran estación depuradora pero tampoco funciona en todas sus fases.

Corta vida

Además de la contaminación industrial está la orgánica que es especialmente alta a partir de la población de Sen Celoní. Los principales focos de contaminación son Matadero Municipal de Torderas, Empresa Bioibérica, Menadional, Industrias Cárnicas Tordera, Matadero Roberto Torres, etcétera. Estas empresas no tienen depuradoras, como tampoco las tienen los municipios colindantes con el Tordera.Como solución a esta gravísima situación que el delegado gubernativo de Gerona y Barcelona para este problema calificó de desesperada, ya que la potabilidad de las aguas terminará dentro de muy pocos años, se propone la creación de una planta de tratamiento centralizado de residuos tóxicos.