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Probable discusión del Estatuto vasco mientras se negocia el catalán

La discusión del Estatuto vasco en la Comisión Constitucional del Congreso podría simultanearse con la negociación del Estatuto catalán, fuera de la Comisión, entre las fuerzas parlamentarias catalanas y el Gobierno. Esta es al menos, según manifestaron a EL PAÍS fuentes centristas, una de las soluciones políticas contemplada en los recientes contactos catalanes con el Gobierno, con el fin de lograr la aprobación de uno y otro Estatuto de Autonomía sin apenas diferencia de tiempo. Este tema será analizado hoy, en la reunión de los dirigentes de los cuatro principales partidos catalanes: Jordi Pujol, Joan Reventós, Gregorio López Raimundo y Antón Cañellas.

La solución citada haría posible salvar lo que establece la disposición transitoria sexta de la Constitución sobre el dictamen de los estatutos por el orden de entrada en la Comisión Constitucional y sucesivamente uno respecto de otro. El plazo de dos meses previsto para este estudio se consumiría al mismo tiempo en el debate parlamentario del Estatuto vasco y la negociación política del Estatuto catalán, de modo que este último pudiera aprobarse en el seno de la Comisión en un plazo mínimo, muy inferior a los dos meses, término establecido en la Constitución con carácter de máximo.

El rechazo, en el seno de la Comisión Constitucional-Reglamento, de la fórmula propuesta por los catalanes para el debate simultáneo de ambos estatutos abrió la vía a la búsqueda de una solución que permitiera satisfacer los deseos de los catalanes, sin perjudicar las expectativas de los vascos, como consecuencia de haberse adelantado en la presentación de su proyecto de Estatuto en el Congreso de los Diputados. Dicha solución ha de encontrarse antes de que el próximo Pleno de esta Cámara, a celebrar el 30 de mayo, decida definitivamente sobre el procedimiento de estudio de los estatutos dictaminado por la Comisión citada.

En este marco se encuadra la entrevista celebrada en días pasados -muy probablemente el domingo último- por el presidente del Gobierno, Adolfo Suárez; el vicepresidente segundo, Fernando Abril, y el ministro de la Presidencia, José Pedro Pérez Llorca, con los dirigentes catalanes de Convergencia Democrática de Cataluña (CDC), Jordi Pujol y Miguel Roca. Aunque el señor Pujol calificó ayer de. totalmente inexacta la noticia de esta reunión publicada por La Vanguardia, y el señor Roca no quiso comentar la noticia, EL PAÍS pudo confirmar, en fuentes centristas solventes, que el encuentro mencionado se produjo efectivamente, así como que los dos diputados catalanes mencionados mantienen un comprensible deseo de que la reunión no trascienda.

Las mismas fuentes manifestaron que también se abordaron en el citado contacto CDC-Gobierno otros temas catalanes, entre ellos el calendario electoral. En principio se estableció como época probable para las elecciones al Parlamento catalán la primavera de 1980, si bien ambas partes aceptaron el carácter variable de este dato.

En las conversaciones que hoy tiene previsto celebrar el señor Pujol con los dirigentes catalanes Joan Reventós (socialista), Gregorio López Raimundo (comunista) y Antón Cañellas (centrista), además de analizar las soluciones en estudio para el debate de los estatutos, se cuidará de modo especial no producir una erosión en las relaciones políticas y parlamentarias con las fuerzas vascas. Están previstos para los próximos días contactos con los parlamentarios vascos, especialmente con los del Partido Nacionalista Vasco (PNV), a fin de tratar de hacer convergentes y compatibles los intentos respectivas de contar en fecha breve con sendos estatutos de autonomía.

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