Los ministros no abusaron de los Mystère

Efectivamente, las dieciséis personas que se trasladaron a Bruselas para el acto de inauguración de las negociaciones con las Comunidades Europeas utilizaron dos aviones Mystère, y ocuparon todas sus plazas útiles a la ida y a la vuelta. El ministro Calvo-Sotelo voló a primeras horas de la tarde del domingo en un Mystére con sus colaboradores para ultimar en Bruselas la redacción y sus traducciones, asistido por el embajador Bassols y por los miembros de la misión española. El ministro Oreja regresó desde San Sebastián a Madrid el domingo por la noche y tomó, con sus colaboradores, otro Mystére a primerísimas horas de la mañana del lunes para llegar a Bruselas con el tiempo justo de atender sus compromisos bilaterales y acudir a la audiencia de su majestad el rey Balduino. No ha habido, pues, abuso de Mystère ni falta de coordinación, sino, al contrario, utilización razonable y coordinada de unos medios que el Gobierno español tiene (como la mayor parte de los Gobier nos occidentales), precisamente para eso: para ser razonablemente utilizados.

Oficina de Información Diplomática. Oficina de Prensa del Ministerio de Relaciones con la CEE