Enfrentamiento entre la Guardia Civil y la Policía Municipal en Zarauz
La Guardia Civil retuvo durante un par de horas a los agentes municipales de la localidad guipuzcoana de Zarauz, a los que pretendían acusar de participación en una manifestación ilegal que se llevó a cabo el lunes en protesta por las medidas adoptadas contra los refugiados vascos. La pretensión de la Guardia Civil de llevar a la pareja de municipales detenidos a la comandancia de San Sebastián no se produjo por la intervención del alcalde zarauztarra y del propio jefe de la Policía Municipal de esta localidad.
Los agentes, como es costumbre habitual, acompañaban vestidos de uniforme a los manifestantes para facilitar el desarrollo del acto y en el momento en que las fuerzas de la Guardia Civil, reprimían a los concentrados se dirigieron al responsable de las FOP para preguntarle la razón por la que no se les había consultado antes de intervenir.
Imanol Burúa, alcalde en funciones de la villa, interpreta el suceso como un intento de desprestigiar la idea de las policías autóctonas y hacerle el juego a Martín-Villa, «porque la Policía Municipal de Zarauz tiene una bien ganada fama de institución vasca, con todos sus miembros euskaldunes».
El señor Burúa, acompañado por el jefe de la guardia municipal, tras fracasar su intento de conseguir que el gobernador le atendiese, se dirigió al cuartelillo, donde explicó que las órdenes habían partido de ambos y que por tanto, si sus subordinados eran detenidos ellos deberían correr la misma suerte. Tras un diálogo entre el responsable del cuartel de Zarauz y el comandante de San Sebastián, se procedió a poner en libertad a la pareja de municipales.
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