Marcelino Oreja reafirma el carácter occidentalista de su política exterior

El Gobierno español mantiene una política exterior firme y clara, sin ningún tipo de ambigüedades, y aunque se siente solidario con los problemas del Tercer Mundo, su meta es la plena integración de España en Europa y en el mundo occidental, dijo ayer en Nueva York el ministro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja.El señor Oreja, que regresará hoy a Madrid, hizo estas declaraciones después de haber copresidido la reunión plenaria del Consejo Hispano-Norteamericano y de haberse entrevistado con el secretario de Estado, Cyrus Vance. El ministro quiso resaltar, de cara a la opinión pública española, que no existe ni ambigüedad ni cambio de postura en la política internacional elaborada por el Gobierno, que sigue considerando que España forma parte del mundo occidental y que, añadió, mantiene cordiales relaciones con Estados Unidos.

Además de Cyrus Vance y Marcelino Oreja, que copresidieron la reunión plenaria, asistieron a la misma el embajador de España en Washington, José Lládó, el embajador norteamericano en Madrid, Terence Todirian, y los presidentes de las respectivas juntas de jefes de Estado Mayor, teniente general Alfaro y general Jones.

Aparte de la reunión del Consejo, el señor Oreja mantuvo dos entrevistas con Cyrus Vance, en las que se abordaron otros temas de interés común o de importancia internacional. Por ejemplo, se habló de Nicaragua y del Sahara, aunque, el ministro español no entró en detalles sobre el contenido y se limitó a decir que Vance estaba interesado en conocer la postura de España respecto a esos temas.

Otro asunto tratado en la entrevista entre Vance y Oreja fue la posible visita a España del presidente norteamericano, Jimmy Carter. El canciller español dijo que existe el propósito futuro por parte de la Administración norteamericana de preparar tal visita en el curso de una gira por Europa del presidente Carter, pero que aún no se ha hablado de fechas y que, por el momento, es un simple propósito.

Después de celebrada la reunión del Consejo Hispano-Norteamericano se hizo público un comunicado conjunto en el que se recoge lo acordado en la misma. Según este comunicado, el Gobierno español recibirá, para que se ha administrado por CAMPSA, el oleoducto Rota-Zaragoza, así como tres zonas de almacenamiento de petróleo en Rota, Torrejón y Zaragoza. Está prevista la continuación del servicio a las fuerzas armadas estadounidenses, quienes reembolsarán a CAMPSA por los gastos de operación y mantenimiento.

Como se esperaba, el Consejo Hispano-Norteamericano pasó revista a una serie de problemas bilaterales, como el de las tasas compensatorias que gravan a los productos españoles, las dificultades de nuestros pesqueros en aguas norteamericanas y el retraso en las entregas de material militar estadounidense a las Fuerzas Armadas españolas.

El comunicado conjunto hace referencia también a la compra por España de aviones F-4C y RS-4C (modelo de reconocimiento) y al comienzo de instalación en España de la segunda fase de la red de alerta y control (combate grande).

Otros aspectos recogidos en el comunicado conjunto hacen referencia al desarrollo de programas mutuos de cooperación en los campos de ciencia, tecnología, educación y cultura.