El museo de Bellas Artes de Bilbao, en dificultades económicas

El museo de Bellas Artes de Bilbao, creado hace 60 altos, con una colección superior a mil obras -entre cerámica, escultura, pintura antigua y contemporanea-, pasa por graves dificultades económicas que podrían hacer peligrar su supervivencia en el futuro. El presupuesto calculado para el año 1978 en 24 millones de pesetas no ha podido aún ser cubierto, ni siquiera en lo que respecta al capítulo de gastos fijos (18 millones). «Estamos aún lejos de lograr esa cifira», declaraba ayer en Bilbao su director, Javier de Bengoechea.«Estoy angustiado por este problema. La partida presupuestaria deben satisfacerla el Ayuntamiento de Bilbao y la Diputación de Vizcaya, pero, por el momento, por problemas de tesorería -sobre todo del primero-, me encuentro colgado, con unos gastos que no puedo hacer frente porque ese dinero no me ha llegado. De los 24 millones de presupuesto acordado preciso angustiosamerite los 18 destinados a gastos fijos indispensables. El resto están destinados a nuevas adquisiciones, reposiciones, obras y mejoras. Esa partida tampoco puede quedar desatendida.»

El reglamento y la junta de gobierno del museo de Bellas Artes de Bilbao fueron creados el 5 de octubre de 1908 por el Ayuntamiento de Bilbao y la Diputación de Vizcaya. La iniciativa de ambas corporaciones culmina en febrero de 1914 con la inauguración del museo de Bellas Artes de Bilbao que queda instalado, de forma provisional, en tres salas del viejo hospital de Achuri de la capital vizcaína. Los fondos, al principio poco cuantiosos, procedían de las colecciones de Laureano Jado y Antonio Plasencia.

En octubre de 1924, y a iniciativa de un incipiente movimiento de jóvenes artistas vascos y el apoyo de algunos diputados, se pone en marcha, también en forma provisional, el museo de Arte Moderno, que se instala en la biblioteca provincial. En junio de 1945, Bilbao cuenta, finalmente, con un edificio apropiado en donde se albergan el arte antiguo y el contemporáneo. Posteriormente, y ya en 1970, quedaría inaugurado un anexo a este edificio -de hechura arquitectónica más actual- al que se traslada el arte contemporáneo.

En lo que se refiere al arte antiguo cabe destacar la presencia en el museo de Bellas Artes de Bilbao de obras de Orrente, Ribalta, Greco, Velázquez, Zurbarán, Ribera y Goya. Hay salas dedicadas a las tablas flamencas y españolas hasta el siglo XVI y al impresionismo. Una sala se ha completado con la densa colección que el museo posee de Darío de Regoyos. En otras salas el visitante puede ver a Solana, Anglada, Camarasa, Sunyer, Canals, Gregorio Prieto, Palencia, Evaristo Valle, Redondela y Novillo.

El museo de Bellas Artes de Bilbao siente hondamente la crisis económica antes aludida, máxime cuando el número de visitantes aumenta año tras año. En el primer semestre de 1978 habían pasado por sus salas 32.562 visitantes contra 24.020 en el mismo período del año anterior. Este crecimiento quiere aumentarse el próximo año hasta lograr que en 1979 el número ole visitantes llegue globalmente a 100.000.