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EI gaullismo se une a la izquierda en sus ataques a la política exterior

«Me siento apenado», comentó en Córcega el presidente Valery Giscard d'Estaing, cuando su portavoz le informó del ataque desencadenado pocas horas antes en París por el líder gaullista Jacques Chirac, contra su política exterior, económica y social. Chirac se manifestó en ese terreno convergente con los jefes de la oposición de izquierdas, críticos severos del intervencionismo francés en Africa.

¿Está agotándose ya la luna de miel del «gran triunfador» de los comicios legislativos de marzo último? Así lo dejaba entender ayer el comentarista del diario conservador Le Figaro, proximo a la mayoría gubernamental, al analizar los diversos componentes de la situación incómoda que empieza a perfilársele al presidente de la República.

El editorialista señaló que, a la vista de la degradación lenta pero continua de la situación nacional, empiezan a aparecer de nuevo las sospechas recíprocas, los procesos de juicio y las segundas intenciones de giscardianos y gaullistas, que caracterizaron el año 1977.

En el hemiciclo parlamentario las denuncias severas de la oposición («Francia es el gendarme africano por cuenta de la OTAN» según el líder comunista, Georges Marchais, paralelo al jefe socialista, François Mitterrand) encontraron apoyo en las manifestada por el representante gaullista, Maurice Couve de Murville, quien, a su vez, se inspiró en los conceptos que, pocas horas antes, había expresado Chirac contra la intervención en Africa: el alcalde de París subrayó las míiltiples «reservas, preocupaciones e inquietudes» que le inspira la política del presidente.

En Africa teme la «vietnamización» y que la diplomacia de Giscard «signifique una vuelta al atlantismo». Chirac afirmó que «los gaullistas queremos muy particularmente que se estrechen los lazos con Argelia y Libia».

Guiringaud puede ser sustituido

El ministro francés de Asuntos Exteriores, Louis de Guiringaud, sería sustituido en otoño por Jean Francois Poncet, actualmente secretario general del Eliseo, informó ayer el semanario parisiense VSD ( Viernes, Sábado, Domingo) basándose en un rumor «que se confirma».No sería ésa, según el semanario, la única modificación del equipo gubernamental.

Dentro de la perspectiva de las elecciones para el Parlamento Europeo, Giscard d'Estaing desearía crear «una secretaría de Estado para Europa».

El actual ministro de la Cooperación, Robeit Galley, «que se queja de no ser informado completamente de las decisiones tomadas en asuntos africanos», podría salir del Gobierno.

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