Remolacheros del Suroeste se manifiestan contra el decreto reguladador

Más de 1.500 empresarios agrícolas de las provincias de Sevilla, Cádiz y Córdoba (4.000, según los organizadores) se manifestaron durante la mañana de ayer por el centro de Sevilla en señal de protesta por la regulación de la actual campana remolachera. La manifestación, que había sido autorizada, terminó en la plaza de España, ante el Gobierno Civil, donde una representación de remolacheros hizo entrega al gobernador civil accidental de un escrito con sus reivindicaciones.Una estruendosa pitada siguió a las palabras de Alvaro Domínguez, presidente del Grupo Provincial Remolachero, anunciando que la primera autoridad de la provincia no había podido recibirles por encontrarse en la reunión de gobernadores que se celebra en Madrid. Sus palabras fueron seguidas por gritos de «fuera, fuera» y algún intento aislado de romper el servicio de orden y marchar hacia las dependencias del Gobierno Civil. No obstante, la manifestación se disolvió sin incidentes.

El escrito señala que la regulación decretada por el Ministerio de Agricultura «con un criterio discriminatorio, injusto, demagógico e irracional» supondrá la reducción en un 17 % de las entregas de remolacha andaluza con respecto al año anterior, con las consecuencias de una disminución del 35% de la superficie cultivada para la próxima campaña (el cultivo en la zona sur ya ha disminuido en más de un 30% en los dos últimos años) y la pérdida de un millón de jornales.

Los remolacheros de Andalucía y Badajoz se sienten discriminados por el hecho de que los criterios para la contingentación se hayan basado exclusivamente en las entregas de la última campana, en que la remolacha andaluza y extremeña sufrió una climatología especialmente adversa. En cualquier caso, indican, estos criterios deberían haber sido advertidos antes de la siembra y no ocho meses después.

En opinión del Grupo Provincial Remolachero, el origen de esta situación radica en las Importaciones masivas de azúcar cubano, con un coste en divisas superior a los 50.000 millones de pesetas, y la falta de disciplina de las zonas norte y centro, que no se han ajustado a los cupos establecidos, provocando los excedentes actuales.

El real decreto que ha motivado la airada reacción apareció en el Boletín Oficial del Estado el día 10 del presente mes de mayo, una vez que la cosecha está muy avanzada y no cabe rectificación alguna de ésta por parte de los agricultores. Buena prueba de este error es que para la próxima campaña la Administración se ha comprometido a presentar los objetivos de producción antes del mes de agosto de este año, lo que evitará, tal como ocurre en la actualidad, que muchos agricultores dediquen más superficie al cultivo de la deseable, según los precios y condicione, de contingentación de la producción.

En la exposición de objetivos del texto regulador se señala que, dado que este cultivo afecta a muchos pequeños agricultores con el fin de conciliar la necesaria limitación de los precios, dado el excedente de azúcar existente, con la intención de no lesionar las rentas de los agricultores más modestos, no se establece contingentación de la producción a los cultivadores con producciones inferiores a doscientas toneladas en la campaña pasada.