Reposición de "El zoo de cristal", de Tennessee Williams

Anoche se presentó en el teatro Marquina le obra El zoo de cristal, de Tennessee Williams, en adaptación de Carmen Vázquez Vigo, dirigida por José Luis Alonso e interpretada por Verónica Forqué Carmen Vázquez Vigo, Francisco Algora y Pep Munné, con escenografía de Emilio Burgos.Esta reposición de El zoo de cristal, del dramaturgo norteamericano T. Williams (1914), que constituyó su primer éxito teatral en Broadway (1945), recuerda la actual revalorización de sus obras más conocidas en escenarios de Estados Unidos y Europa, tras el fracaso de sus dramas más recientes. De esta forma se vuelven a representar obras conocidas en España en versiones cinematográficas y teatrales, como Verano y humo, La caída de Orfeo, Un tranvía llamado deseo, La noche de la iguana, Dulce pájaro de juventud y La gata sobre el tejado de cinc, montada también por José Luis Alonso e interpretada por Aurora Bautista.

«En otros escenarios mundiales -declaró a EL PAIS el director José Luis Alonso- se vuelven a reponer los grandes éxitos de Tennessee Williams. Sus últimas obras no han tenido aceptación y esta especie de agotamiento y decadencia se da también en autores de su generación como Miller y Albee, sin que surjan nuevos autores que los reemplacen. En los años cincuenta y sesenta, cuando se montaron sus obras en nuestro país, no conectó demasiado con el público medio. A excepción de El zoo de cristal, que parece de otro autor, sus obras de ambientes corrosivos, que presentaba a la sociedad americana después de la guerra, con personajes frustrados, alcohólicos, drogadictos, el público no se identificaba con este mundo que era desconocido y como de otro planeta.»

El zoo de cristal contiene elementos autobiográficos de Williams, que traslada a sus personajes dentro de un ambiente que recuerda a Chejov, en opinión de José Luis Alonso. «El tiempo no ha deteriorado esta obra bellísima y hecha con materiales simples. Tal vez la magia de la obra y ese ambiente etéreo, de cristal, se deba a los toques autobiográficos. Los personajes de El zoo de cristal son entrañables, muy distintos a los de sus obras posteriores. Creo que es difícil hacer una obra con tan pocos elementos; está despojada de falsas adherencias.»

« El ámbito escénico, creado por Emilio Burgos, es irreal, rodeado de pesados muros de ladrillo que ahogan el mundo ideal de los personajes, que quieren escapar de la realidad. No es una obra totalmente realista, tiene unas claves simbólicas que subyacen en el texto. El personaje-narrador dice que es "una obra en el recuerdo". Más que las complicaciones externas de montaje me ha interesado la dirección de personajes, estudiar con matices sus interrelaciones, su mundo y pequeñas tragedias. »