La Alianza Atlántica, de acuerdo con UCD

La clara orientación del Gobierno español hacia un ingreso de España en la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) coinciden con las tesis del cuartel general del citado organismo, con sede en Bruselas, según medios próximos a la división política de la OTAN.La intervención del ministro español de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, que se manifestó totalmente favorable a la incorporación de España a la OTAN, no provoca, por el momento, ninguna reacción oficial.

Los mismos medios políticos aliados señalan que ante la posible incorporación de España a la OTAN hay que pensar que: la situación de las islas Canarias pasaría a ser completamente territorio de la OTAN; sería considerado precedente peligroso un ingreso sólo en el capítulo político, dejando aparte el sector militar; no se cree que la eventual incorporación se realizará antes de 1980, si se quiere que Madrid sea la sede en 1980 para un nuevo encuentro de la Conferencia de Seguridad y Cooperación Europea.

Respecto a Canarias, la OTAN recuerda que «la resolución de la OUA (Organización para la Unidad Africana) no le afecta por no tratarse de un territorio de la Alianza Atlántica. El caso es distinto en el tema de Madeira, al ser territorio portugués y Portugal Estado miembro de la OTAN.

Por otra parte, se recuerda que, en su artículo sexto, el tratado de la OTAN dice, respecto a la definición de zonas bajo tutela de la Alianza que «se consideran las islas situadas bajo jurisdicción de una de las partes (de un Estado miembro) en la región del Atlántico Norte o al norte del Trópico de Cáncer». Situación en la que se encontrarían las islas Canarias, en caso de adhesión de España a la OTAN.

Opción política y militar

En relación con la posibilidad expuesta por el ministro Oreja de adherirse a la OTAN sólo en su Comité Político, para beneficiarse de los aspectos diplomáticos, pero quedar al margen del Comité Militar (situación que tienen Francia, desde 1967, y Grecia, desde agosto de 1974), no hay opción final, aunque sería mal vista.La unanimidad requerida entre los actuales quince Estados miembros de la OTAN para aceptar el ingreso de un nuevo Estado miembro -cuya demanda debe venir del aspirante- comportaría un ingreso con todas sus consecuencias, políticas y militares, dicen en círculos de la OTAN.

Por último, en relación con las hipótesis de una fecha eventual de ingreso de España en la OTAN, se cita 1980. Al parecer, la fecha va ligada a la elección de Madrid como sede del nuevo encuentro de la CSCE en dicho año, y, por parte de España, al interés de convocar cierto paralelismo entre el ingreso en la OTAN y la adhesión al Mercado Común.

Sin entrar abiertamente en la polémica, los medios,de la OTAN apoyan los proyectos de UCD y Alianza Popular, partidarios de la entrada en la OTAN, pero evitan definirse públicamente ante la oposición del PSOE y el PCE.