Absentismo forzoso

En EL PAIS del pasado día 9, y en crónica desde Barcelona, se denuncia mi absentismo en la cátedra de Patología y Clínica Médicas de la facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Barcelona. Tal absentismo, ajeno a mis intereses y en conflicto con mi vocación y entrega universitarias, tiene sólo una explicación que queda clara en el siguiente escrito del decano de aquella facultad.«Don José de Portugal Alvarez ha tomado recientemente posesión de la plaza de profesor agregado numerario de Patología y Clínica Médicas de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Barcelona. La situación actual de la facultad es realmente peculiar, ya que al no disponer de instalación hospitalaria propia, las enseñanzas del período clínico, incluida la Patología Médica, se realizan en los hospitales concertados, encargados de impartir las asignaturas, el personal contratado de cada institución. Esto lleva a una situación verdaderamente heterodoxa, puesto que el profesorado numerario del período clínico, no tiene misión docente-asistencial, en tanto que no se disponga del futuro Hospital Clínico, lo que no será una realidad hasta octubre de 1977, en el mejor de los casos. Por consiguiente, el profesor Portugal se encuentra en una situación verdaderamente desoladora. Conociendo su valía universitaria, como profesor y como médico, hubiéramos deseado incorporarle a las tareas universitarias en nuestra facultad, pero en la situación actual, su presencia aquí, con una visión realista, queda supeditada a su conveniencia, puesto que se comprende, sería una frustración tenerle en Barcelona, sin ninguna actividad definida. Por ello, si puede mantener su actividad asistencial e investigadora en Madrid, este decanato no puede moralmente poner ninguna objección. La situación personal del profesor Portugal no es la única en esta facultad y pone de manifiesto la falta de previsión del Ministerio de Educación y Ciencia en la planificación de la Facultad de Medicina. Bellaterra, 28 de octubre de 1976. Firmado: profesor José Luis Balibrea Cantero.Decano.»

Mantenida esta situación hasta el momento, he cumplido mis obligaciones docentes, asistenciales y de investigación que no he podido realizar en Barcelona, en la Facultad de Medicina de Madrid, esperando la solución de este conflicto que soy el primero en padecer. Mi dedicación a la Universidad, durante dieciocho años, es completa y exclusiva, sin concesión alguna por tal dedicación y por personales concepciones sociales, al ejercicio privado de la medicina, y estoy ansioso y necesitado de entregarme a mi labor en la Universidad.