Estupor ante la calificación de "colonia africana"

Todo el mundo coincide en las islas en que el último fin de semana ha significado la gota que ha terminado por llenar el vaso de la confusión y de inseguridad ante el futuro de Canarias. Perplejo ante la decisión del Consejo de Ministros de la Organización para la Unidad Africana (OUA) de declarar el archipiélago como colonia africana, sorprendido por el apoyo de esta organización al MPAIAC, inquieto por los artefactos colocados en Santa Cruz y La Laguna los últimos días y defraudado por el fracaso de la diplomacia española ante la reunión de Trípoli, el pueblo canario -primero del país en porcentaje de analfabetos- comienza a plantearse su futuro de forma muy oscura y a darse cuenta de la crisis histórica que está atravesando.

Lo que en principio parecía como otro número folklórico -el independentismo alimentado por las emisiones de La Voz de Canarias Libre, silenciada cuando ya no se oía gracias a las potentes interferencias- se ha convertido ahora para la opinión pública canaria en una seria encrucijada que necesita una salida urgente y eficaz. «Es tiempo -afirma el periódico El Día en su editorial del pasado domingo- de terminar con las teatrales condenas del Congreso, del Senado, de las corporaciones, etcétera. Una política firme, enérgica y rotunda es lo que debe aflorar». Bien es verdad que en las islas apenas se le dio importancia al movimiento independentista que capitanea Antonio Cubillo desde Argel, porque su fuerza se medía aquí según el arraigo que tenía entre la población isleña. Sin embargo, como afirma el senador independiente por Fuerteventura, Miguel Cabrera, el peligro está ahora en que la política que haga el Gobierno de Madrid y que afecte a las islas -no contando con ellas para nada- vayan a favorecer las tendencias independentistas.Diario de Avisos, por su parte, culpa en su último editorial al Gobierno, a la Oposición y hasta a la prensa nacional y local. Con respecto al Gobierno dice el matutino tinerfeño que «con una política confusa e incoherente ha permitido el nacimiento y desarrollo del separatismo»; de la Oposición, que «ha contribuido a crear una imagen exterior falsa» y que flirtea con los argelinos y el Frente Polisario, y con respecto a la prensa, «por supravalorar lo intrascendente, haciendo el caldo gordo a lo que pensábamos inicuo y se ha vuelto peligrosísimo».

Por otro lado, la resolución de la OUA sobre Canarias ha dado pie al afloramiento, en diversos sectores sociales, de un fenómeno que ya tenía olvidado el canario: el racismo. El tinerfeño El Día titula en primera página «Romper con Africa», y expone que «nada nos liga al continente negro; ni siquiera esa Guinea desagradecida y dictatorial que estuvo chupando todo lo que pudo del presupuesto español hasta que, quijotescamente, le dimos la independencia». Más adelante se refiere a «los fallidos esfuerzos económicos de nuestra Feria del Atlántico para que los negros compren nuestros productos, y los pocos negros que compran, luego no pagan». Asimismo, los partidos políticos PSOE, PSP y Partido Comunista de Canarias, junto a las centrales sindicales UGT y CCOO han convocado ante la evolución de los acontecimientos, para mañana, miércoles, El día deprotesta canario contra el acuerdo pesquero, por un Gobierno canario autónomo, contra la injerencia extranjera (tanto de la OTAN como de la OUA).

Por último, hay que señalar el aumento de la vigilancia policial en las calles de las dos capitales canarias durante los últimos días. Ya el pasado domingo, en los aledaños del estadio Insular, se concentraron numerosas unidades de la brigada antidisturbios mientras se jugaba, en un ambiente tenso, el partido de fútbol entre el Las Palmas y la Real Sociedad. El público volvió a gritar Sí, sí; los godos a Madrid y Godos, fuera.