El País Vasco y su autonomía

«... Hace un mes que el País Vasco ha recibido, por decreto, un régimen de preautonomía, y ninguna institución todavía se ha establecido. La integración de Navarra es hipotética. Los militares de ETA no han disminuido la lucha armada...Todos los gestos de apaciguamiento arrancados en Madrid han quedado sin efecto.

Pero, in situ, el pesimismo se atenúa. Muchos independentistas hablan un lenguaje menos radical de lo que se creía. Su moderación, relativa, refleja el cansancio de una población, después de meses de tensión y de movilización popular. ¿Qué es lo que retrasa la pacificación del País Vasco? La respuesta es unánime: la presencia de la policía represiva. ETA ha manifestado que continuaría sus atentados hasta la partida de todas las fuerzas de represión. ETA no habla en nombre de todos los vascos. Parece que su popularidad ha bajado, pero traduce un sentimiento fácilmente discernible.

Exigir la marcha de la policía parece, a primera vista, una quimera, pues las unidades vascas que les sucederían no ofrecen, para el Gobierno, y sobre todo para el Ejército, ninguna garantía. «Se podría adoptar una fórmula de transición, dice Juan María Bandrés, senador de la izquierda vasca independentista: «vasquizar la policía»...

La inestabilidad del País Vasco obedece, según nuestros interlocutores, al hecho de que las elecciones del 15 de junio no expresan la relación real de fuerzas en la región. La coalición Euskadiko Esquerra obtuvo el 10% de los votos...

Otros partidos habían preconizado la abstención. Todos estaban en la ilegalidad, lo que impedía su propaganda. De hecho, según un sondeo de Cambio 16, alrededor de un 20% de la población sería favorable a la independencia. ¿Qué independencia? Sobre este punto las ideas son confusas o contradictorias. Los dos partidos que han obtenido la mayoría en las elecciones (PNV y el PSOE) reivindican sólo la autonomía...

El PNV no reivindica va, como en los años 30, un ejército autónomo ni relaciones particulares con el Vaticano. El racismo de sus militantes, que ha sido muy criticado, ha disminuido. (...) Sueñan con una nación vasca unida a una Europa de los pueblos, en el que el viejo antagonismo con Madrid sería superado por las instituciones supranacionales, como el Parlamento europeo.

Otra emboscada en la vía de la autonomía vasca: Navarra. Si Guipúzcoa es la más vasca de las cuatro provincias, si Vizcaya Y Alava cuentan minorías castellanas, Navarra es vasca solamente a la mitad.

La querella ha adquirido el aspecto de un antagonismo entre la derecha y la izquierda. Pero, en razón de un sistema electoral injusto, la UCD posee la mayoría de los diputados y senadores de la provincia, aunque han obtenido solamente un 28% de los votos y el partido gubernamental se opone a la incorporación de Navarra al régimen autonómico vasco...

El problema navarro es tan grave que puede paralizar todo el proceso de autonomía...»

8 febrero